Obama reorientará su estrategia en Siria e Irak

El presidente de EEUU dijo a los cabecillas del Estado Islámico que «no se pueden esconder» porque son el principal objetivo de la campaña militar contra el grupo yihadista en Irak y Siria y defendió de nuevo sus planes en una declaración hecha en el Pentágono.

Una semana antes de poner rumbo a Hawái para disfrutar de sus vacaciones de Navidad, Barack Obama ofreció en el Pentágono una conferencia de prensa tras la primera ronda de sesiones sobre contraterrorismo con expertos estadounidenses. No aceptó preguntas. Fue una declaración de ocho minutos que destacó sobre todo por su tono, más agresivo que en otras ocasiones, quizá para plantar cara a sus advesarios políticos, que no cesan sus críticas contra el presidente por su mano blanda contra el Estado Islámico (EI). Sin embargo, al igual que hace ocho días en su discurso desde el Despacho Oval, Obama no presentó un cambio de estrategia en la lucha contra el EI, al que ya ha atacado con más de 9.000 bombardeos aéreos. Sí incidió en que noviembre fue el mes en el que más ataques aéreos contra el EI se produjeron. «Los líderes del Estado Islámico no se pueden esconder, y nuestro mensaje es sencillo: ‘Sois los siguientes», indicó el presidente flanqueado por su equipo de guerra.

Durante su discurso, enumeró a los líderes eliminados de este grupo terrorista sobre los que tiene puesto el foco EE UU. Entre ellos, se incluye el verdugo conocido como «John el Yihadista» –el artífice de la mayor parte de las decapitaciones de occidentales–, a quien supuestamente habían abatido en noviembre, pero que, según se dedujo de las palabras de Obama, sigue vivo. En su lista, están también otros altos mandos como Abu Sayyaf, el segundo del grupo terrorista; Haji Mutazz, el reclutador en internet Junaid Hussain, el jefe financiero Abu Saleh, el jefe de los extorsionadores Abu Maryam, el traficante de armas Abu Rahman al Tunisi y el líder Abu Nabil. «Iremos a por ellos uno a uno. Cada día destruimos más fuerzas del EI, sus posiciones de ataque, escondites, zonas de intervención, sus armas pesadas, la fábricas donde preparan las bombas, sus complejos y sus campos de entrenamiento», insistió Obama, que recordó que hasta el momento los terroristas liderados por Abu Bakr al Bagadi han perdido el 40% del territorio con el que se había hecho el califato en Irak.

«La lucha es todavía difícil. Reconocemos que es necesario que el progreso sea más rápido. Nadie lo sabe mejor que los sirios y la gente que vive bajo el terror, al igual que los ciudadanos de San Bernardino», reconoció el presidente en referencia al primer atentado del EI en territorio estadounidense, que acabó con la muerte de 14 ciudadanos.

En esta ocasión, Obama decidió que la reunión con los expertos en defensa tuviera lugar en el Pentágono en vez de en la sala de situaciones de la Casa Blanca, donde normalmente se desarrollan este tipo de encuentros de contraterrorismo. Fue una manera de reforzar su mensaje y su estrategia en Irak y Siria. Esta reunión es la primera de tres que tendrán lugar esta semana. Además, Obama anunció ayer que su secretario de Defensa, Ashton Carter, viajará hoy a Oriente Medio para tratar de aumentar las contribuciones de esos países a la campaña militar de la coalición internacional contra el EI.