Un Tribunal egipcio considera al brazo armado de Hamás «grupo terrorista»

El Tribunal Administrativo de El Cairo determinó hoy que el brazo armado del movimiento islamista palestino Hamás, las Brigadas Izadín Al Qasam, son un grupo terrorista, confirmó a Efe una fuente judicial. La fuente precisó que, según la sentencia, que se puede recurrir ante el Tribunal Supremo Administrativo, cualquier persona que pertenezca a esta agrupación o que contribuya a su financiación podrá ser detenida y juzgada.

La lectura de la sentencia, que se había retrasado en una ocasión, se conoce dos días después de una serie de ataques y atentados contra las fuerzas de seguridad en el Sinaí, fronterizo con la Franja de Gaza, en la que más de 30 personas perdieron la vida.

Uno de los abogados que presentaron la denuncia contra el grupo palestino explicó a la agencia oficial Mena que las Brigadas Izadín Al Qasam participaron en varias operaciones hostiles en territorio egipcio contra el Ejército y la Policía.

Asimismo, acusó a esta milicia y a su organización madre, Hamás, de financiar y participar en operaciones terroristas en Egipto a donde llegan sus miembros a través de los túneles entre la franja palestina de Gaza y la península del Sinaí, según el letrado.

Además, consideró que las Brigadas Izadín Al Qasam han contribuido, desde la revolución del 25 enero 2011, a la inestabilidad en Egipto.

El grupo Izadín Al Qasam, la facción palestina armada más influyente, fue creado a principios de los años noventa. No reconoce a Israel y entre sus métodos para intentar liberar el territorio palestino incluye los ataques suicidas y el lanzamiento de cohetes contra las poblaciones israelíes.

El pasado 4 de marzo de 2014, este mismo tribunal emitió un fallo que prohibió todas las actividades de Hamás en Egipto y estipuló la confiscación de sus oficinas, aunque no declaró terrorista al grupo palestino,

Antiguos responsables egipcios testificaron el pasado abril durante una sesión del juicio contra el depuesto presidente Mohamed Mursi que miembros de Hamás y del grupo libanés Hizbulá estaban detrás de los ataques contra cárceles registrados durante la revolución que derrocó en 2011 al presidente Hosni Mubarak.