Una protesta en Viena contra la ultraderecha deja 15 detenidos y 20 heridos

Veinte heridos, quince detenidos y daños materiales por valor de un millón de euros, es el balance de los incidentes registrados el viernes por la noche en Viena durante la protesta contra un acto de la ultraderecha, informó hoy la Policía.

La manifestación, convocada contra un baile organizado por el ultranacionalista Partido Liberal Austríaco (FPÖ), reunió a entre 6.000 y 8.000 personas en el centro de la capital y transcurrió en líneas generales de forma pacífica.

Sin embargo, algunos grupos de manifestantes encapuchados atacaron vehículos policiales, destrozando once de ellos, una comisaría y comercios, señaló hoy la radiotelevisión pública ORF, citando fuentes policiales.

La ministra del Interior, Johanna Mikl-Leitner, lamentó que un grupo de violentos desacreditara a una mayoría de manifestantes pacíficos.

La Policía ha sido objeto de críticas por haber desplegado agentes frente a la Academia de Bellas Artes, donde se celebraba una jornada nocturna de puertas abiertas, para controlar a quienes salieran del edificio, ante la sospecha de que manifestantes violentos se habían escondido allí.

Previamente, varios medios de comunicación, sindicatos y la ONG Reporteros sin Fronteras habían denunciado la decisión de cerrar todos los accesos, incluido a los periodistas, a la zona del Hofburg, donde se celebraba el "Akademiker Ball"del FPÖ, conocido por su discurso xenófobo y ultranacionalista.

La última edición del baile se celebró en 2012 con la participación de cofradías estudiantiles conocidas por sus simpatías nazis, así como de líderes "ultras"europeos como la del Frente Nacional francés, Marine Le Pen.

El baile de 2012 desató la polémica porque se celebró el 27 de enero, coincidiendo con el Día Internacional de Conmemoración del Holocausto.