La onomatopeya del baile

Aunque casi han conseguido que perdamos la memoria a base de machacarnos con «Get Lucky», de Daft Punk, en cualquier momento, cualquier ciudad y continente, no han logrado que perdamos la memoria. Antes que ellos, otras bandas mezclaban la electrónica con la música disco con tanta clase como los franceses, aunque con menos reconocimiento. Y unos de los que mejor lo han hecho en el pasado y lo siguen demostrando son !!! («chk chk chk»), una factoría de hacer bailar y sudar más que en el gimnansio, gracias a su mezcla de funk, disco, dub, house, rock psicodélico y punk. Su último trabajo, «Thr!!!er», es todo un puñetazo en la mesa que no escucharán en las radios, pero que tienen la oportunidad de presenciar en directo en Madrid (24 de octubre), Barcelona (25) y Bilbao (26).

Basta decir que el disco se abre con uno de esos temas que hacen bailar a cualquier cosa que tenga pulso: «Even When the Water's Cold» comienza con una cita de Cortázar, lo que nos da la medida de que no estamos ante otro grupo iletrado de California, y el estribillo en falsete reglamentario va creciendo mientras el ritmo, pegadizo y vacilón, invita a levantarse. «La música, es una obviedad, puede hacer sentir muchas cosas, pero lo que nosotros tratamos de que ocurra es simplemente conectar con algo primario, con lo más básico del alma, con esa sensación que te hace subir el volumen y ponerte de pie. Eso es lo que yo quiero que le ocurra a la gente y lo que más me interesa», dice al teléfono Nic Offer, cantante de la formación, que ha cambiado varias veces de componentes y ahora, más difícil todavía, trabaja con la mitad de sus unidades desde la costa Este y la otra mitad en la Oeste. Este trabajo, el quinto de la formación, tiene una sólida base electrónica en la que colaboró como pieza esencial Jim Eno (Spoon), que ha producido el disco. «Lo que Jim nos ha dado es una línea que seguir. Tiene ideas estéticas y conocimiento. Sabe por dónde abrir caminos y cómo construir una canción con cierto método, pero sin sacarnos a nadar fuera de nuestras aguas. Nosotros somos muy anárquicos, aunque con Jim se estableció una conexión muy fuerte», asegura.

Que la gente baile sigue siendo algo importante para la banda, que ha dejado atrás la etiqueta de vanguardistas que les colocaron en sus orígenes, para convertirse en un grupo totalmente orientado al directo. Por eso, el éxito tampoco se ha convertido en una presión: «Para nosotros hay diferentes niveles de éxito. Estamos bastante lejos de tener uno del tipo clásico y enorme, pero, ¿sabes?, para nosotros la definición de éxito es un club lleno de gente volviéndose loca. Tocamos en muchas ciudades de muchos países, de varios contientes, y eso es una buena medida de éxito, aunque no llenemos un estadio de fútbol», explica Offer.

En el álbum hay un pequeño homenaje a la patria chica del grupo (original de Sacramento, California), en el tema «Californiyeah». «En él tratamos de comunicar nuestra visión de California, de lo que es y en lo que me ha convertido. Me encanta ese lugar, aunque ya no viva en él, así que también se ha convertido en un tema sobre lo que es no estar en California. Vivo entre neoyorquinos y así es como me he dado cuenta de que mi actitud se ha modelado allí. Respecto a California siento algo que se parece a amar a una chica con la que no puedes estar, por muchas razones».