Los trucos de una «it girl»

Paula Echevarría es uno de los personajes más buscados y solicitados por todas las marcas. Todos sus conjuntos son copiados al instante por miles de seguidoras. Sus cambios son más de estilo, de color o corte de pelo que de retoques estéticos, que, por supuesto, también se ha realizado, pero siempre de modo gradual y casi imperceptible. Pasó por quirófano para mejorar su nariz, así como también para una cirugía de aumento de pecho, que ella siempre ha reconocido. No es una mujer acomplejada, aunque se siente mucho más a gusto ahora con su nueva talla. Está orgullosa asímismo del éxito que tiene su pelo. Su base es un castaño claro con algo de mecha natural. Sólo se hace retoques de raíz, que ahora mismo están en una mezcla de tonos 7 y 8, y desde realiza poco se hace «plumas» (mechas muy finitas y en pequeña cantidad) pero sólo de la mitad de la cabeza hacia abajo. Siempre acude a Tacha a realizarse sus tratamientos y es Natalia de la Vega, alma mater de este templo quien le aconseja los tratamientos. Normalmente recurre a los hidratantes y regenerativos.

Está entusiasmada con Martine de Richeville, una gurú francesa licenciada en psicología y medicina china que finalmente se centró en el método de Rudolph Steiner para armonizar el cuerpo a través de la terapia curativa del movimiento. Su revolucionario método «Remodelage» reafirma y remodela el cuerpo activando su metabolismo y eliminando la celulitis. Cada tres meses se hace una especie de bótox capilar con ácido hialuronico y cítrico, así como un cóctel de zumos naturales sin químicos que aportan al pelo brillo y sedosidad. Una terapia que también puede realizarse en el salón de Alma Luzon en el barrio de Salamanca.