Viajes

Trucos para ahorrar en las vacaciones de verano

Los días de vacaciones y el presupuesto suelen ser los dos factores que determinan el destino elegido para el viaje

Trucos para ahorrar en las vacaciones de verano
Trucos para ahorrar en las vacaciones de veranolarazon

Los días de vacaciones y el presupuesto suelen ser los dos factores que determinan el destino elegido para el viaje

El 28% de los españoles va a gastar más dinero durante las vacaciones de verano que el año pasado, según el Barómetro Internacional de Verano 2019, un estudio realizado por Ferratum, mientras que el 39% espera que el presupuesto sea más o menos igual que el año pasado.

En 2018, tal y como preveía una encuesta de American Express, el gasto medio para sus vacaciones de verano fue de 2.070 euros. El 41% de los encuestados afirmaba que su desembolso rondaría entre los 1.000 y 2.500 euros, el 36% menos de 1.000 euros y solo en un 6% de los casos el cómputo global sobrepasaría los 5.000 euros.

En ese sentido, el informe señalaba que la duración media de las vacaciones era de 15,6 días, comparado a los 17,9 de 2016 (año de la anterior encuesta). Así, uno de cada dos españoles destina entre una y dos semanas a sus vacaciones de verano y el 29% de los españoles se coge de tres semanas a un mes. Durante todo ese tiempo, casi la mitad (45%) hace más de un viaje, sin ceñirse únicamente a un solo destino.

En algunos casos, para cuadrar las cuentas, los españoles buscan las mejores opciones de ahorro sin tener por qué renunciar a la calidad del servicio. Solo es cuestión de buscar e invertir tiempo.

Bueno, bonito y barato

Julio y agosto son los meses preferidos por los españoles para disfrutar de sus vacaciones, de ahí que se les conozca como temporada alta. Sin embargo, también se puede disfrutar del buen tiempo y de los días con muchas horas de sol por menos dinero.

Para ello, hay que apostar por viajar en junio o septiembre, meses donde hay menos afluencia de turística y, por lo tanto, menos demanda. Esto se traduce en precios más asequibles, la imposibilidad de que haya overbooking e incluso más probabilidades de improvisación, es decir, no tener por qué planearlo con tanta antelación.

Si la opción es trasladarse en avión, otro de los trucos es dejar que sean los buscadores quienes ‘elijan’ por el usuario las fechas tanto de ida como de vuelta en función de los días donde haya menos demanda. Eso sí, para ello hay que ser flexible y dejarse llevar por las ofertas que ofrece el sistema informático. Y, en el caso de los vuelos largos, siempre existe la posibilidad de incorporar escalas o decantarse por los que despegan a primerísima hora.

Según los expertos, es más sencillo encontrar chollos en vuelos que en hoteles. Eso no quiere decir que no los haya, es cuestión de bucear por las webs buscando cuál es la ‘oferta del día’, evitar de alguna manera reservar en fin de semana o que no coincida con las fiestas o eventos que se celebren en el lugar escogido.

En verano, además, se tiene más tiempo libre, por lo que se dedican más horas para navegar por internet con el dispositivo, recibir las alertas de móvil sobre algo que nos interese en concreto o, por supuesto, llamar a los seres queridos. De ahí que sea fundamental tener las mejores tarifas para que el presupuesto no se descuadre.