Don Simón revoluciona el mercado con un nuevo envase más ecológico

Don Simón vuelve a demostrar que es pionera en la sostenibilidad del planeta al elaborar un envase que reduce a la mitad las emisiones de CO2.

Don Simón vuelve a demostrar que es pionera en la sostenibilidad del planeta al elaborar un envase que reduce a la mitad las emisiones de CO2. La compañía española líder en zumos, ha revolucionado el mercado con el lanzamiento de algo totalmente novedoso: envases de cartón natural que contienen más de un 60% de materiales de origen vegetal, 100% reciclables y con menos emisiones de CO2.

La antigua capa blanca sobre la que se imprimían los colores ha sido sustituida en este nuevo envase por un cartón natural y reciclable en su totalidad. Esta importante modificación supone un fuerte cambio visual pero, sobre todo, un férreo compromiso con el medioambiente de la mano de un envase más ecológico.

En el nuevo etiquetado se pueden observar tres logotipos que representan la fidelidad de la entidad con la conservación de nuestro entorno. Los dos primeros indican que el 100% del envase es reciclable y que, actualmente, más del 60% es de origen vegetal, una cifra que se prevé que aumente durante este año hasta el 80%. Esta mejora del envasado se traduce en una reducción del 53% de gramos de dióxido de carbono, cifra que según el Instituto de Investigación de Energía y Medio Ambiente (IFEU) no va a pasar desapercibida. «El envase es más respetuoso con el medioambiente, es más limpio y a su vez mantiene la imagen de la marca de Don Simón», afirman desde la empresa.

Vanguardia, tecnología y sostenibilidad

La planta de Huelva, lugar donde se exprimen gran parte de estos zumos, se sitúa a la cabeza en cuanto a vanguardia, tecnología y sostenibilidad se refiere. La planta, situada en la localidad de Villanueva de los Castillejos, es pionera a nivel mundial en un proyecto en el que se deben cumplir a rajatabla tres ceros: cero consumo neto de agua, cero emisiones contaminantes y cero residuos. Tradicionalmente, las grandes empresas han estado reñidas con la preservación del medio ambiente y muchas de ellas no han logrado concienciarse de la importancia de respetar nuestro planeta hasta hace muy poco tiempo. En el caso de Don Simón, la sostenibilidad siempre ha sido la punta de lanza en su estrategia empresarial.

«El concepto de «economía circular» que está ahora de moda lo llevamos aplicando en Huelva desde hace muchos años, somos la única empresa a la que el proceso de producción no le cuesta dinero, sino que le genera riqueza», apuntan desde la compañía. En la planta de elaboración de zumos de Huelva se llevó a cabo un importante proyecto para revalorizar la cáscara de la naranja después de ser exprimida. El departamento de investigación de Don Simón consiguió convertir la cáscara de la naranja en otros productos como pienso animal, aceites esenciales e incluso perfumes. Por lo tanto, no sólo se resolvió los problemas logísticos que implican el desecho de la cáscara sino que además se descubrió otra oportunidad de negocio.

Para regar las cerca de 1.500 hectáreas que albergan millones de naranjos en los alrededores de la planta, haría falta una enorme cantidad de agua. El equipo científico de la compañía halló una nueva técnica que no sólo reutilizaba el 100% del riego, sino que la totalidad del agua reciclada servía también como fertilizante para mejorar la calidad del fruto. Además, en todos los procesos de producción, la fábrica utiliza la depuradora para generar gas metano, que es mucho menos contaminante y permite reducir el 30% del consumo de gas natural, un combustible fósil con mayor impacto medioambiental. El aprovechamiento máximo del producto y las avanzadas técnicas llevadas a cabo ha propiciado que el coste por cada tonelada de zumo generada sea de once euros negativos. Es decir, producir no les cuesta dinero sino que lo ganan.

Y por si todo esto fuera poco, la planta de Huelva ha reservado un total de 250 hectáreas dentro de la finca para la recuperación y preservación de la avutarda –un ave esteparia catalogada en peligro de extinción– y su hábitat natural. Además, anualmente Don Simón dona al Banco de alimentos más de 125.000 toneladas de zumo para los más necesitados, por lo que la producción también posee un beneficio social importante. Con razón la empresa ha cambiado su tradicional eslogan de «Don Simón cuida de ti» por «Don Simón cuida de ti... y del planeta».

De la familia al mundo

Don Simón pertenece al grupo J. García Carrión, un claro ejemplo de cómo una empresa familiar es capaz de expandirse por todo el mundo. La tradición agrícola, que ha estado presente en el seno familiar durante cinco generaciones, se remonta al año 1890, cuando el bisabuelo del actual propietario de la entidad, José García-Carrión, creó una pequeña bodega en la localidad murciana de Jumilla. Las características propias del clima y del terreno en España ofrecen una oportunidad de oro para aquellos que deseen cosechar vino.

Desde entonces, la compañía no ha parado de crecer dentro y fuera de España hasta convertirse en la primera bodega de Europa. J. García Carrión, a diferencia de otras grandes compañías que han sido vendidas al extranjero, sigue estando dirigida por la misma familia española que soñó con convertirse en lo que son hoy en día: la referencia del vino europeo. Algunas de las señas de identidad de J. García Carrión son la apuesta firme por la agricultura española y los productos naturales, el ofrecimiento de un producto que apuesta por la mejor relación entre la calidad y el precio, y un conocimiento de los mercados internacionales que le permite estar presente en más de 150 países.

Los números de la entidad la señalan como una de las empresas más importantes del mundo. La compañía cuenta con la colaboración directa de aproximadamente 40.000 agricultores que extienden sus cosechas a lo largo de más de 155.000 hectáreas. Además de ser la primera bodega de Europa y cuarta del mundo, actualmente está presente en diez denominaciones de origen y sus vinos son mundialmente por premios internacionales.

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