El otro CIS

En el arte de la quiromancia se puede vislumbrar el porvenir del futuro político de España

El último barómetro sociológico situaba a Podemos de Pablo Iglesias al mismo nivel que el PP. Sin embargo, en el arte de la quiromancia se puede vislumbrar el porvenir del futuro político en España. La lectura de las manos ha resuelto más de una situación: y es que las líneas no están escritas sin razón alguna

Mariano Rajoy: Destino sin alteraciones

En la mano de Mariano Rajoy llama la atención la potencia de la zona basal, ancha y carnosa, indicativa de una sólida implantación en el mundo de las realidades materiales, capacidad de realización y una necesidad de resultados prácticos. Las líneas principales de la mano son limpias y están bien marcadas, pero presentan varias peculiaridades dignas de mención. La de la cabeza, que, por su longitud e inclinación hacia el monte de la Luna denota inteligencia, buena concentración y ciertas dotes imaginativas, se curva hacia arriba en el centro produciendo un estrechamiento en el espacio que la separa de la línea del corazón. En el plano fisiológico esto refleja posibles problemas respiratorios, mientras que en el psicológico puede incidir en que su poseedor no tome decisiones sin antes haberlas meditado a fondo y que, cuando las toma, lo haga con una sensación de ahogo y opresión. La línea de la vida es clara, está reforzada y rodea ampliamente el monte de Venus: vida larga y fructífera. La del corazón también presenta una buena curvatura: llega hasta la base del dedo índice y eso muestra emotividad, cordialidad y facilidad para expresarse. La línea del destino está partida hacia la mitad aunque su trazo profundo refleja una trayectoria intensa y bien definida hasta avanzada edad. En los dedos dominan las falanges basales largas, que se asocian con el mundo material y fomentan el apego al terruño y la resistencia al cambio. La buena longitud del dedo índice potencia sus dotes de mando y cierto autoritarismo, al igual que el pulgar cuadrado, largo y rígido, refuerza la obstinación y la tenacidad, así como la capacidad para imponerse.

Posee buen equilibrio entre las tres zonas de la mano (instintiva, afectiva y cerebral), lo cual favorece un discurso cabal y contundente dada la fuerza global de la mano. No obstante, el conservadurismo a ultranza que muestra su mano vigorosa pero lenta en reaccionar puede jugarle una mala pasada en las próximas elecciones generales justo en un momento en que el país exige cambios de gran calado. Eso no impide que la línea del destino prosiga su curso sin alteraciones.

Pedro Sánchez: Diez años en la brecha

Hay un rasgo que destaca en la mano de Pedro Sánchez, el dirigente socialista: el espacio ancho entre la línea de la cabeza y la del corazón. Es señal de gran amplitud de miras y libertad de pensamiento. Además, la de la cabeza no sólo es larga sino que, además, es bastante recta, de modo que hay inteligencia concreta, concentración, cálculo y predominio del pensamiento práctico. Habría también inflexibilidad si los dedos no fueran flexibles, pero sí lo son, por lo que la tendencia se suaviza.

Por otra parte, en algunas falanges terminales hay almohadillas de la sensibilidad (pequeñas protuberancias en forma de gota de agua) indicativas de un elevado sentido del tacto, así como plasticidad intelectual y emocional. Dado que estas falanges son largas, se incrementan la percepción y el espíritu idealista y constructivo.

Más interesante si cabe es la configuración del dedo pulgar, que en el caso de Sánchez es grande y bien desarrollado, con la falange terminal larga, cuadrada y doblada ligeramente hacia afuera: junto a dotes de mando hay capacidad de contacto, dinamismo mental y apertura, que refuerza la citada amplitud de miras observada en la marcada separación entre las dos líneas transversales. Disfruta además del apoyo realizador de la zona inferior de la mano ancha y muy carnosa, que le aporta vigor, estabilidad y voluntad sólida. Las líneas de Pedro Sánchez son claras y profundas y confirman una magnífica vitalidad. Además, tiene la fortuna de poseer una doble línea de la vida que potencia su buena salud. La del corazón, bastante recta y larga, sugiere que es persona muy cerebral a pesar de su aparente cordialidad. La línea del destino es limpia y clara pero fragmentada, lo que significa un cambio profundo en su trayectoria vital durante un tramo de tiempo de unos diez años pasados los cuarenta. Y luego la línea desaparece en el monte de Saturno, bajo el dedo corazón, acaso diluida bajo las fauces de esta figura mitológica, emblema del tiempo que todo lo destruye y fagocita.

Pablo Iglesias: Éxito irregular, pero largo

Si buscamos alguna peculiaridad en la mano de Pablo Iglesias la encontraremos en su línea de la cabeza: atraviesa la palma y está unida a la del corazón. No deja de ser una rareza porque dicha configuración proporciona brillo intelectual y originalidad, pero sobre todo imprime gran vigor y determinación en todo cuanto hace su poseedor.

Los dedos son flexibles y eso aumenta la sociabilidad y la rapidez de actuación. Por sus falanges terminales largas se deduce elevada inteligencia y percepción, junto con fuerte carga de idealismo, un deseo innato de orientarse a causas espirituales y morales. Por otra parte, el pulgar largo y flexible, con la falange terminal cónica, favorece la fuerza de voluntad, las dotes de persuasión y mando. Dado que la mano posee buena consistencia y una zona basal mullida y bien desarrollada, al dinamismo mental y potencia del pulgar hay que añadir energía realizadora, continuidad en la acción e incluso sentido práctico. Se trata, en definitiva, de una mano ágil, de consistencia elástica y textura de piel fina. La superficie palmar presenta multitud de líneas finas de aspecto «vivaz» que fomentan la necesidad de actividad constante y variada. Todo ello repercute en una personalidad inestable emocionalmente (palma larga) y dada a juicios intuitivos, rápidos y decisiones igualmente rápidas (dedos cortos en relación con la palma).

Otro rasgo interesante es el estrecho ángulo que forma el pulgar al separarse de la palma: si tiende a cerrarse habitualmente refleja dependencia de las convenciones y las opiniones del medio ambiente, además de inseguridad, máxime porque el dedo índice es corto en relación con el anular. Esto se contradice con la fuerza del pulgar bien dotado para el mando.

La línea del destino nace centrada cerca de la muñeca y avanza durante un buen trecho: hay independencia y una progresión creada por el esfuerzo personal. Más adelante se fragmenta y bifurca: el tramo del dedo anular apunta hacia una orientación filantrópica, paralela a un pequeño tramo bajo el dedo corazón que muestra habilidad para mantenerse activo hasta edad avanzada a pesar de lo irregular de la trayectoria a lo largo de su recorrido: se diluye en el centro de la palma.