Los Reyes Eméritos, en el cumpleaños de Urdangarín

Don Juan Carlos y Doña Sofía celebraron con una comida en un restaurante de Ginebra el 50 cumpleaños de Iñaki Urdangarín, a la que también acudió la Infanta Elena.

Han querido que sea una celebración en la más estricta intimidad, tanta, que pocas personas saben que los Reyes Eméritos estuvieron en Ginebra para celebrar el 50º cumpleaños de Iñaki Urdangarín. El encuentro fue en un restaurante de la ciudad, al que se le pidió la máxima discreción posible. La Infanta Cristina y Urdangarín asistieron acompañados de sus cuatro hijos, Juan Valentín, Pablo Nicolás, Miguel e Irene. Además de Don Juan Carlos y Doña Sofía también viajó con ellos la Infanta Elena, que está muy unida a su hermana, con sus vástagos Felipe y Victoria Federica. A ellos se sumaron dos importantes personalidades cuya identidad no se ha revelado.

Es más que probable que en este encuentro también se haya festejado el 80º aniversario de Don Juan Carlos, ya que ni la Infanta Cristina ni sus hijos estuvieron presentes en la comida privada que se celebró en La Zarzuela, a la que sí asistieron cerca de 70 personas. Poco antes, la hija mediana de los Reyes Eméritos disfrutó de unos días de vacaciones en Roma con su familia prácticamente recién llegados de Vitoria, donde acostumbran a pasar las Navidades en compañía de la familia de Urdangarín. A uno de los festejos navideños se unió la Infanta Elena.

La última vez que se vieron en público Don Juan Carlos y Doña Sofía con la Infanta fue el pasado mes de mayo, en la capilla del Palacio Real, durante el funeral en memoria de Alicia de Borbón-Parma. Padre e hija se intercambiaron miradas y se sonrieron.

Es la primera vez que ha trascendido que el Rey Emérito visite Ginebra para ver a su hija, todo apunta a que no lo había hecho desde que la Infanta Cristina reside en Suiza con su familia adonde llegó en 2013. Allí sigue desempeñando su labor como directora del área Internacional de la Fundación «La Caixa». No sucede lo mismo con Doña Sofía, que lo hace frecuentemente, ya sea por alguna efeméride, como el cumpleaños de alguno de sus nietos, o simplemente para acompañar a su hija, como cuando el matrimonio residió durante tres años en Washington.

Cada verano, en calidad de abuela , Doña Sofía quiere reunirse unos días con todos sus nietos en Marivent y no faltan a la cita Juan Valentín, Pablo Nicolás, Miguel e Irene, ya que siempre ha estado muy volcada en que los niños no pierdan contacto con España.