Evita que envejezca tu piel

NO TE QUEMES AL SOL

Las monjas de clausura y los esquimales son las personas con la mejor piel por el simple motivo de que no les da el sol. Quemarte es la forma más rápida de envejecer la piel y, además, de exponerte al riesgo de padecer melanoma a medio y largo plazo. Todos pensamos en ponernos protector solar durante los meses de verano, pero el envejecimiento se produce durante todo el año tanto en hombres como en mujeres. No se trata simplemente de embadurnarte todo el cuerpo cuando estás de vacaciones en la playa. Una solución fácil es usar una crema hidratante con filtro solar a diario para evitar cualquier problema.

CUIDADO CON EL JABÓN

La piel tiene una capa natural de grasa que la protege y la hace impermeable. Cuando nos lavamos la cara y el cuerpo con un jabón agresivo estamos eliminando esta protección natural y dejando la piel expuesta a la luz, la humedad, el frío o calor y la deshidratación. Una solución radical adoptada cada vez por más gente es lavarse solo con agua. Tampoco hay que ser tan drástico. En su defecto, merece la pena invertir en un jabón suave sin detergente que respete la protección natural con que cuenta la piel. Si el jabón contiene exfoliantes, servirá para eliminar las células muertas, pero cuidado, porque entonces habrá que proteger la piel con crema.

HAZ EJERCICIO

Sí, hacer ejercicio te ayuda a mantener un peso y porcentaje de grasa saludable, aumenta tu masa muscular y te hace parecer más joven, pero además es bueno para la piel. El ejercicio, especialmente el de fuerza, hace que se produzca un mayor flujo sanguíneo a la superficie de la piel, lo que a su vez aumenta los niveles de oxígeno en las células y ayuda a eliminar más rápidamente los productos de desecho que tengamos en el cuerpo. Por si fuera poco, al aumentar el volumen de los músculos la piel se tensa sobre ellos, dando ese aspecto «tonificado» que tanto se valora en la actualidad.

DUERME Y NO FUMES NI BEBAS

La falta de sueño es uno de los factores que puede acabar antes con la salud de tu piel, especialmente en zonas delicadas, como alrededor de los ojos y, además, puede echarte una década más encima. El motivo es que la falta de sueño hace aumentar el cortisol, la hormona del estrés, que inhibe la regeneración de los tejidos. Si no hay regeneración de las células, la piel envejece y se arruga considerablemente. Si combinas la falta de sueño con el alcohol y el tabaco tendrás la receta perfecta para tener piel de elefante en unos pocos años. Cada hora de sueño que sumes y cada cigarrillo y copa que restes cuentan, y mucho, en la salud de tu piel.