Política

Año en negro de los «perdedores»: más paro y recortes a cuenta del bipartito

La Razón
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«Lucharás contra el paro sobre todas las cosas». Ése «mandamiento» encabezaría las hipotéticas tablas de la ley extraídas del balance que el PP-A realizó ayer de los primeros doce meses de Gobierno bipartito.El secretario general de los populares andaluces resumió en diez puntos lo que consideró las políticas erradas de IU y PSOE, que han conducido, en su opinión, a «perder un año para aplicar reformas que están funcionando en otras comunidades». El crecimiento pavoroso del desempleo –con uno de cada cuatro andaluces sin trabajo– es para Sanz la principal causa de la desastrosa valoración que realizó de la gestión de José Antonio Griñán y su socio, Diego Valderas.

«El pacto de perdedores nos aleja de la recuperación económica», reiteró el líder del PP-A, que vaticinó que «de seguir a este ritmo, Andalucía puede perder el tren y seguir a la cola de todos los indicadores», por lo que exigió a Griñán que «impulse un cambio cuanto antes». Para ello, creyó fundamental abandonar «las políticas fracasadas».

Uno tras otro, Sanz fue desgranando los «errores» de la gestión de izquierdas. El fundamental, el «problema estructural» en que se ha convertido el desempleo. En este sentido, lamentó que combatirlo no haya sido una «prioridad» para la Junta, lo que ha contribuido a que «la tendencia en Andalucía sea siempre la misma: cuando el paro crece en España crece más en nuestra comunidad y cuando baja, lo hace menos». Todo ello, aseguró, es fruto del «continuismo con 35 años de gobiernos socialistas», junto al nulo respaldo a los sectores productivos y la falta de contención del déficit, que impiden la «autofinanciación» de la región.

En el «negro» decálogo figuran además los recortes en sanidad, educación y políticas sociales –que cifró en un 5, 10 y 40 por ciento respecto a 2011–, así como la presión fiscal y el «grave sobrepeso de la Administración». Para Sanz, IU y PSOE llevan «un año mordiendo la mano que les da de comer», en alusión a la confrontación-dependencia del Ejecutivo central, que ha ayudado a Andalucía con 13.000 millones de euros, según estimaciones del PP-A. Sin esa aportación «no se pagarían nóminas, servicios sociales y proveedores». Por último, criticó que IU sea ahora «cómplice» de la corrupción al considerar que «ha cambiado transparencia y regeneración por despachos oficiales», pese a que «las responsabilidades políticas del 'caso ERE'están cada vez más claras y el cerco se estrecha cada día más en torno al despacho de Griñán».