Susana Díaz

Díaz da un salto atrás de 20 años al desempolvar «la pinza» contra Chaves

Moreno sostiene que no va a permitir que PSOE y C’s «amordacen» el Parlamento

La presidenta de la Junta, ayer en el Pleno respondiendo a las preguntas de la oposición
La presidenta de la Junta, ayer en el Pleno respondiendo a las preguntas de la oposiciónlarazon

El de ayer fue un Pleno anómalo. El primer Pleno de Susana Díaz tras su maternidad, la primera vez que preguntaba el líder de C’s Juan Marín –por despiste en la anterior sesión– y con las tradicionales preguntas a las presidenta de las doce de la mañana en sesión vespertina. El motivo del cambio fue que Díaz estuvo por la mañana inaugurando junto a Rajoy el segundo puente de Cádiz.

Sin la presión del flash del telediario de mediodía y con el circulante sanguíneo ayudando a los diputados a digerir el almuerzo, la sesión plenaria fue calma chicha hasta que la jefa del Ejecutivo y el principal líder de la oposición, Juanma Moreno (PP-A) entraron en el cuerpo a cuerpo bien pasadas las cinco de la tarde. Moreno apeló a los escleróticos cien días de Gobierno de Díaz y a la mordaza compartida con C’s para paralizar en la Mesa su proposición de ley de bajada de impuestos. La defensa de Díaz era previsible. Buscó el burladero de «la pinza», rememorando los 90 de Arenas y Rejón; y de la confrontación con Rajoy, al que culpó de imposibilitar que la Junta tenga manos libres para aminorar la presión fiscal. Con todo, hizo hincapié en que en las próximas cuentas aumentarán las inversiones, además de las partidas para educación y sanidad. Nada concretó de la reducción del tramo autonómico del IRPF que le pidieron tanto PP como C’s y que Chaves prometió eliminar hace algún tiempo. «Rajoy nos lo está poniendo muy difícil»

«Pasó hace 20 años», adujo Díaz en su dúplica a Juanma Moreno. «La izquierda y la derecha se unieron en el Parlamento para no dejar que el Gobierno gobernara. ¿Y sabe cómo respondieron los andaluces? Desalojando a estas formaciones». Falta algún capítulo de esa historia de 1994-1996, cuarta legislatura, que ayer rememoró Díaz. Y es que Chaves a finales de diciembre del 94 se vio obligado a retirar su Proyecto de Ley de Presupuestos, prorrogó las cuentas, siguió gobernando a golpe de decreto y dio patada hacia adelante a la legislatura más corta, más convulsa y menos productiva para la economía que se recuerda en 30 años de autonomía. Ese fantasma, actualizado y aumentado –ahora son cinco las fuerzas parlamentarias– vuelve a tomar cuerpo.

«No busque más coartadas para tapar su incapacidad de gestión», replicó Moreno a las quejas de trato por parte de Rajoy a Andalucía. «La regla de gasto es la misma para todas las comunidades y usted es la única que se queja. Maneja bien el látigo de la confrontación, pero necesita mejorar con las riendas de su gobierno».

La presidenta de la Junta atacó a Moreno por su «pasado» como «número dos» de Ana Mato en el Ministerio de Asuntos Sociales. «Dejó miles de damnificados», le inquirió. Moreno esperaba el espuelazo –no es la primera vez que Díaz abre ese melón– y saltó como un resorte: «Lo que tuve en el Ministerio es que pagar el agujero – ‘así de gordo’, dibujó con las manos– de 1.000 millones de euros que dejó Rodríguez Zapatero».

Cuando más subió el tono Moreno fue cuando abordó el bloqueo de las iniciativas legislativas de PP y Podemos en la Mesa del Parlamento. «Lo que no esperaba es que usted vetara y amordazara el Parlamento, eso no lo esperaba». «Da instrucciones a sus diputados para parar las iniciativas en la Mesa de la Cámara. Eso es letal para la democracia. Y no vamos a permitir que por su miedo a la democracia, se pisotee la democracia».

La presidenta recurrió al bloqueo de los 80 días –de marzo a mayo– que tuvo que esperar para ser investida presidenta. No olvida la larga espera. «Ahora llevan a cabo el plan B. Quieren maniatar al Gobierno para que no gobierne usando el Parlamento».