Expedición a Suiza: el portavoz del SAT intervendrá en la ONU y «se verá» con Anna Gabriel

Ruido y polvareda provocan a menudo los movimientos de Óscar Reina, secretario general del Sindicato Andaluz de Trabajadores, el icónico SAT. Pero eso no lo detiene. ¿Próxima parada? La Organización de las Naciones Unidas (ONU). El próximo martes emprenderá un nuevo viaje esta vez con un destino: la ciudad suiza de Ginebra. Ha sido invitado por Red Nacional de Derechos Humanos, una organización que, según explica el propio Reina a LA RAZÓN, tiene «mucha actividad en Venezuela» y también trabaja «en España». El objetivo es «hablar» de la situación que atraviesan los «derechos humanos y laborales»» en el Estado español, del que forma parte Andalucía, a la que, a buen seguro, aludirá en su intervención en Naciones Unidas.

El portavoz del SAT, cargo que ha servido a sus antecesores como el ahora diputado nacional de Podemos Diego Cañamero para ponerse en escena aún desde detrás de ella, subraya la «importancia» de la cita ya que serán, dice, «interlocutores con el Gobierno de España» y los únicos que le pondrán reparos a lo que éste «está diciendo» sobre la realidad del país. Destaca que les «den audiencia en la ONU» y lo interpreta como un espaldarazo a «la lucha» que la organización sindical que encabeza «lleva» en la comunidad y por la que a veces los «denigran». «Aquí nos toman por locos», sostiene, para sacar pecho por que con la invitación cursada les estén «dando» el «crédito» que «sí» tienen.

Explica a este periódico que se reunirá con «cuatro o cinco relatores de derechos humanos de distintos campos» con el propósito de radiografiarles «la situación que tienen los presos en el país», los problemas laborales, o la «exclusión que viven» las mujeres. De acuerdo a la agenda con la que se maneja Reina, intervendrá en público el 21 y regresará previsiblemente el viernes 23.

Durante su estancia en Suiza «se verá», según avanzó a este diario, con Anna Gabriel, la dirigente de la CUP y ex diputada que ha buscado refugio en aquel estado, desde el que se ha negado a regresar para prestar declaración en calidad de investigada en una de las causas judiciales abiertas contra los dirigentes del «procés» catalán. Reina asevera que intentará «estar a la altura de las circunstancias porque es una necesidad que escuchen lo poco que se respetan aquí los derechos laborales y los derechos humanos» y «dar voz ante tanta sordera y corrupción política». «No voy de paseo, haré lo que pueda en la ONU para que sepan lo que aquí abajo se sufre», remata.