Sevilla

IU acepta que PSOE y PP se repartan la Presidencia y el Consejo de la FAMP

Muñoz y Toscano, en la asamblea de noviembre de 2011 que se cerró en falso
Muñoz y Toscano, en la asamblea de noviembre de 2011 que se cerró en falsolarazon

La apuesta del PP-A por retirar la demanda de juicio oral que presentó a finales de 2011 contra el acuerdo que modificaba el censo e incluía a las mancomunidades entre los votantes para renovar la dirección, ha devuelto a la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP) a la actualidad mediática.

Los populares han justificado el gesto, meses antes de la vista preliminar que situaban en mayo, en un intento de «resetear» la organización, que debía haber actualizado la composición de sus órganos hace más de un año. Sin embargo, la reacción en el resto de partidos miembros del ente, PSOE, IULV-CA y PA, no ha sido la esperada, al menos de cara a la galería. De hecho, el secretario general del PP-A, José Luis Sanz, se mostró ayer «sorprendido», según recogió Ep, por el «nulo interés por desbloquear la FAMP» demostrado por las tres fuerzas políticas. Palabras con las que aludía al hecho de que su respuesta a la retirada de la demanda haya sido urgir a la popular Ángeles Muñoz –presidenta temporal de la FAMP tras la salida del socialista Francisco Toscano por discrepancias internas con su partido– a convocar a los órganos colegiados para ejecutar el pacto a tres bandas ya existente entre los socialistas, los izquierdistas y los andalucistas. ¿Por qué pasa ese acuerdo? Por un Gobierno compartido entre todos los partidos con presencia en ejecutivos municipales, bajo la Presidencia del PSOE. Alianza que hicieron extensiva al PP y que para Sanz evidencia el interés de IU y PA por «apuntalar» al PSOE. Desde el ámbito de esas últimas siglas, el vicesecretario general, Mario Jiménez, defendió con su habitual trazo, que el repliegue de los populares en los juzgados significa que la asamblea abortada de noviembre de 2011 «fue legal» y «desmonta todo lo que ha venido diciendo el PP».

«Más vale tarde que nunca», apostilló, para exigir a Muñoz que «abandone una responsabilidad que no le corresponde» y proceda a convocar a los órganos colegiados para poner al día la institución. Pero hay trastienda. Según ha podido saber este periódico, socialistas y populares han mantenido conversaciones para buscar una salida que podría pasar por que el PSOE ostente la Presidencia ejecutiva de la federación y el PP la del Consejo Municipalista Andaluz, máximo órgano entre asambleas y el encargado de desarrollar las resoluciones aprobadas por aquéllas. A ello hay que sumar vicepresidencias para ambos «y contar con un número similar de representantes», apuntan. ¿Y qué pasa con IU, socio de gobierno de los socialistas en la Junta y cuyo líder, Diego Valderas, advirtió ayer a Muñoz de que «los castillos a veces se convierten en mazmorras»? Fuentes de la coalición despejan la incógnita.

Explican que en las negociaciones entre esta formación, PSOE y PA, se contemplaron dos escenarios: uno con la incorporación de los populares y otro sin ellos. En el primero se dibujó «una distribución de las responsabilidades entre todos los órganos de la federación, respetando los resultados de las elecciones municipales interpretados en función de los estatutos de la FAMP». Una «propuesta integradora y pluralista» que, confían, es lo que «habrá trasladado el PSOE al PP». ¿Cabe en ella el reparto apuntado? Sí, afirman, para admitir que IU aspira a la Presidencia del Consejo Andaluz de Gobierno Locales, órgano de la Junta que no forma parta de la FAMP pero, «que en la práctica es como si lo fuera». Ente que, cabe recordar, está presidido aún por Toscano. Creen que así se cerraría un «capítulo lamentable» del municipalismo andaluz.