Empleo
La Junta no gastó uno de cada cuatro euros para orientar a parados
Empleo justifica que sólo se otorgaron 23 de los 30 millones previstos para Andalucía Orienta porque no hubo suficientes entidades solicitantes
Empleo justifica que sólo se otorgaron 23 de los 30 millones previstos para Andalucía Orienta porque no hubo suficientes entidades solicitantes.
Los 30 millones presupuestados para el año pasado en el programa Andalucía Orienta de la Junta se quedaron finalmente en 23. Prácticamente uno de cada cuatro euros que debían destinarse a la orientación laboral de desempleados de larga duración –más de doce meses– y discapacitados no se destinaron a tal fin, según datos facilitados por la Consejería de Empleo, Empresa y Comercio. Las previsiones presentadas a finales de 2014 por el consejero apuntaban a que se beneficiarían 225.000 parados a través de las distintas iniciativas del Andalucía Orienta. Para ello contaría con 1.151 técnicos especialistas en orientación laboral distribuidos en 309 unidades a partir de enero del año siguiente. Esas cifras suponían incrementar el alcance de la anterior convocatoria –la primera en la que se aplicaron criterios de concurrencia competitiva–, que contó con 189 unidades, desarrolladas por 139 entidades andaluzas y un total de 683 técnicos especialistas con un presupuesto final de 27 millones de euros, pese a fijarse un margen de gasto de 40 millones.
Los desempleados atendidos en itinerarios personalizados de inserción (IPI), la principal herramienta de Andalucía Orienta, fueron 185.905. Sumando el resto de iniciativas ligadas al programa, los beneficiarios rondaron los 212.000, algo por debajo de las estimaciones de la Consejería. Esta iniciativa implica un apoyo específico para el acceso al mercado laboral, así como su tutorización en los seis primeros meses de incorporación a un puesto de trabajo.
El motivo para el descenso en la ejecución presupuestaria estaría, según la Consejería, en la falta de interés por parte de entidades, que son quienes gestionan estos programas, así como en el incumplimiento de los requisitos por parte de muchas de ellas, lo que provocó que no fueran admitidas. El Orienta ya provocó un terremoto en 2013 al corroborarse la falta de justificación de las subvenciones por parte de entidades como UGT o CC OO. De hecho, se incorporó una penalización de 30 puntos para las beneficiarias que, o bien renunciaron a la subvención o no iniciaron la actividad en al menos un 25% de las unidades concedidas. Además, la orden implantó un mayor control de los objetivos cumplidos: el 75% del gasto se adelantaba al conceder la subvención, mientras que para percibir el 25% restante se redujo a un mes el plazo para la justificación de la ayuda.
Respecto a la convocatoria de 2016, la Asociación de Profesionales de Orientación Laboral de Andalucía (APAO) denunció a principio de año que la resolución definitiva por parte de la Junta «empeora aún más la situación prevista inicialmente», ya que los trece millones de presupuesto total se convierten en poco más de diez. La resolución de la dirección general del Servicio Andaluz de Empleo (SAE) con fecha 14 de octubre de 2015, cifraba en un máximo de 15,6 millones el presupuesto –13 para orientación y acompañamiento a la inserción y 2,6 para experiencias profesionales para el empleo–.
81.400 mujeres encontraron trabajo en otras comunidades
Madrid y Cataluña recibieron casi a la mitad, mientras que a Andalucía llegaron 39.700 en 2015
M. M. RECA- Sevilla
El informe «La mujer en el mercado laboral andaluz 2015», publicado con motivo del 8 de marzo por el Observatorio público Argos, desvela que más de 81.400 mujeres emigraron a otras comunidades españolas para trabajar, siendo Madrid el destino más habitual (26.534 andaluzas encontraron trabajo) y seguida de Cataluña (12.289). Sevilla, con 16.381 mujeres, y Málaga (12.248) fueron las provincias que más salidas registraron.
El movimiento inverso, trabajadoras que vinieron a trabajar a Andalucía, se culminó con casi 39.700 empleadas de fuera. De nuevo Sevilla (9.329) y Málaga (7.281) fueron las provincias con mayor movilidad. El saldo global para el año pasado fue, por tanto, negativo (-41.765 trabajadoras).
La tasa de paro femenino en la comunidad sigue estando cinco puntos por encima de la de los hombres –32,87% frente a 27,29% en febrero–. De los nuevos contratos registrados en esa fecha, el 38% se hicieron a mujeres (274.622 del total de 712.000). A lo largo de 2015, el número de mujeres paradas registradas en Andalucía se redujo en 11.606 mujeres, un 2,17% menos que el año anterior.
La evolución del paro registrado ha sido más favorable para los hombres, ya que se produjo un descenso del 7,4%, que en términos absolutos implican 35.103 parados menos.
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