Más de sesenta sevillanas para cantarle al mundo de los toros

«Que Dios reparta suerte», el primer disco por sevillanas dedicado en exclusiva al mundo de la tauromaquia ya está en la calle y ha visto la luz de la mano del compositor y poeta José León. El autor demuestra su enorme pasión y respeto por el toro incluyendo en este nuevo trabajo sesenta y dos temas inéditos entre sevillanas, poesías y una rumba, acompañadas musicalmente de unos compases distintos a lo que se ha hecho hasta ahora con este palo. De hecho, son muy flamencas y otras contienen un toque de blues. Una música, también compuesta por León, realizada con sonidos reales de toros en la plaza y en su hábitat natural, de caballos, de pasodobles y demás ecos que envuelven a este mundo, y con sones procedentes de instrumentos, tales como la típica guitarra española, el piano, el violín, el oboe, el duduk y todo tipo de percusiones, que son cantadas por diversos intérpretes.

El trabajo, que se presentará hoy en la hacienda El Vizir, ha supuesto para el autor «una de esas faenas que uno va improvisando», algo que le ha permitido volver a ilusionarse con el toro, indicando además que lo fundamental para hacer este trabajo ha sido que se ha puesto delante, donde «se viven unas experiencias únicas». A su vez, se mostró «muy ilusionado» porque según indica el productor musical José Enrique de la Vega, se trata de «una obra de peso y un trabajo sin precedentes, único, y será un revulsivo para el mundo de las sevillanas y en el taurino».

El fotógrafo taurino Carlos Núñez, que ha colaborado en este trabajo al incluir un libro de 40 páginas de momentos inéditos con imágenes suyas, destaca que «a cada sevillana le acompaña una foto única». Por su parte, el director del sello discográfico, Jaime Roldán, subraya «la pasión con la que José ha hecho este disco que contagiará a todo el mundo», a lo que ha añadido que se trata de «un trabajo muy exclusivo para gente de verdad».

El disco, en el que todas las sevillanas van unidas musicalmente, incluye temas que se podrían dividir en tres bloques imaginarios. Por un lado, se encuentran las dedicadas a figuras del toreo del pasado siglo que han hecho historia, un segundo dedicado a las plazas de toros de distintas provincias y un tercero que engloba a aquellas sevillanas que versan sobre distintas circunstancias que invaden el mundo taurino como son los duros comienzos de un chaval que quiere ser torero, los sentimientos antes de salir al ruedo o cuando un matador de toros se retira, la mujer del torero que llora su ausencia, el campo bravo, los banderilleros e incluso los mozos de espada y los enanitos toreros.

A su vez, ha dedicado temas a la Macarena, a la Caridad del Baratillo, a Doña María de las Mercedes de Borbón-Dos Sicilias, gran aficionada y madre del rey de España, y a la Fiesta Española, sevillana en la que realiza una crítica hacia los antitaurinos. El disco también incluye una rumba, titulada «El toro y su luz», dedicada a la grandeza de la Fiesta así como dos poemas dedicados al toro.