Sevilla

Solicitar una «mordida» de 180.000 euros no es «nada irregular», según UGT

La Razón
La RazónLa Razón

SEVILLA- El secretario general de UGT Andalucía, Francisco Fernández, aseguró ayer que Salvador Mera, sindicalista detenido dentro de la «Operación Heracles II» «no hizo nada irregular». Mera, que ocupa el cargo de secretario provincial de UGT en Cádiz, está imputado por los presuntos delitos de tráfico de influencias, malversación, falsedad documental y contra la Hacienda Pública. La Guardia Civil considera que negoció con el responsable de la mediadora Uniter, José González Mata, «el pago de una comisión» a su sindicato de 180.000 euros –más IVA–, «con pleno conocimiento de la ilicitud de la misma, la cual constituye una parte de las sobrecomisiones que la mediadora Uniter ha percibido, dinero que en última instancia procede del erario andaluz».

Sin embargo, la solicitud de esta «mordida» –que justificó por los gastos en pancartas y manifestaciones para arreglar la situación de los trabajadores de la Faja Pirítica y de la que también se benefició CC OO en la misma cuantía– respondió, según Fernández, «a un trabajo sindical que han hecho tantos y tantos compañeros en defensa de los intereses de los trabajadores».

El secretario general de UGT-A también anunció que el sindicato estudiará acciones judiciales si considera que «hubo algún exceso» en las detenciones de sindicalistas dentro de la «Operación Heracles».

Además, y pese a la existencia de grabaciones, Fernández apuntó que el jueves durante las concentraciones de sindicalistas en los juzgados de Sevilla «no se profirió ningún insulto ni descalificación, ni muchos menos de la jueza Alaya». La intención era «dar ánimos» a los compañeros.