Tristán Ulloa dirige «Adentro» en el Lope de Vega

El hilo conductor es la celebración de cumpleaños de la matriarca de una familia argentina.

La primera entidad en la que representamos un rol es la familia. Cada uno tiene un papel asignado sólo con el orden del nacimiento como primera providencia hasta que la personalidad va reclamando el que le toca por méritos propios o ajenos. Sólo hay que pararse un poco a observar cómo padres, primos, sobrinos, hijos asumen una intervención como actores de una pieza que no hemos elegido y de la que se sale, o no, cuando la madurez llama a la puerta. Se trata de un universo cerrado, polémico, al que en raras ocasiones nos atrevemos a asomar nuestra nariz por miedo a ver de cerca nuestras propias miserias. La literatura sabe bien que estas relaciones bajo un mismo techo, cargadas de presión, a veces asfixiantes y otras delirantes, son un buen filón para la dramaturgia porque las buenas historias, las que marcan de verdad al espectador, nos enfrentan con el hábitat donde sobrevivimos. Piensen en el cine o en alguna pieza teatral que traten sobre este tema, a los pocos minutos verán signos de concomitancia propios y de su congéneres.

Hoy en el teatro Lope de Vega de Sevilla tienen la oportunidad de asistir a la representación de la obra «Adentro», de Carolina Román bajo la dirección de Tristán Ulloa, que con anterioridad se había hecho con la responsabilidad del montaje «En construcción». La Negra, el Negro, Male y Marga protagonizan una pieza cuyo hilo conductor es la celebración del cumpleaños de ésta última, matriarca del clan, quien cita a sus amigos de juventud. Una etapa en la que se quedó anclada pese a que haga décadas que aquello pasara. Para el director, se trata de «la historia de una familia argentina que se puede extrapolar a cualquier parte del planeta al tratar asuntos que son universales», que se combinan mediante una estructura formada por la mezcla de humor y drama. Con una puesta en escena muy concreta, el trabajo de los actores se convierte en la rueda principal en la que se sustenta una trama que busca impactar al espectador para que «cuando se vaya del teatro no sea el mismo». Intenciones directas y dramaturgia comprometida que sale del propio escenario hasta tocar la fibra del que ve la obra. El mecanismo funciona al poner sobre la mesa que la familia es una «mochila con la que se nace», que no nos deja un ápice de elección pero en la que es posible que quepa todo si la rellenas con inteligencia e independencia. Hasta ahí llega Marga, que un día «debe decidir si continúa con la vida que lleva o si por el contrario debe empezar un nuevo camino con su familia».

Martirés del Compás, en concierto

Por otro lado, en el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo de Andalucía (CAAC) actuará esta noche a partir de las 21:30 horas el grupo Mártires del Compás tras ocho años de silencio. La banda sonora de los años más canallas de los 2000 la firmó este grupo a medio camino entre la copla, el rock, el flamenco, ¿el blues? En el concierto recuperarán las canciones de su primer disco «Flamenco Billy», del que se cumple 20 años de su publicación así como sus temas emblemáticos. No estarán solos, junto a la banda estarán Tomasito, Mario Díaz, La Destylería y la soundsystem Babushka Balkian Party. Si se pierde esta cita, no se entristezcan, darán más conciertos pues celebran estas dos décadas con la gira «Hola y adiós», que hará sumergirse en la nostalgia adolescente a los que ya han rebasado la frontera de los 40.