Abren una red de calor urbana en veinte edificios universitarios de Valladolid

La red de calor urbana con biomasa forestal ya suministra energía térmica -calefacción y agua caliente- a una veintena de edificios de la Universidad de Valladolid y a cuatro de la Junta. Una infraestructura impulsada por el Gobierno autonómico y la UVA, con financiación a cargo del Banco Europeo de Inversiones y de los Fondos Feder. Una puesta en marcha de este sistema más eficiente, que contó con la presencia de los consejeros de Educación y de Fomento y Medio Ambiente, Fernando Rey y Juan Carlos Suárez Quiñones, respectivamente, así como del rector del campus vallisoletano, Daniel Miguel, quien resaltaba que se trata de «una oportunidad para la Universidad pero también para la ciudad, un camino por el que tenemos que seguir ya que aún puede crecer más con la incorporación de otros edificios».

Doce kilómetros de tuberías, soterradas y aéreas, conectadas a través de una central térmica de donde parte el circuito y que comunica a veintidós edificios académicos entre facultades, colegios mayores, institutos de investigación, escuelas, residencias así como otros cuatro de la Junta encuadrados dentro del complejo deportivo Río Esgueva.

Una red, que impulsa calor a noventa grados centígrados con un retorno situado en los setenta, llega hasta la puerta del Hospital Clínico Universitario, susceptible de sumarse a la misma a partir de un concurso público para gestionar la distribución del agua caliente y la calefacción.

El cercano polideportivo Miriam Blasco y otras dependencias del Ayuntamiento también podrían beneficiarse de este sistema que prevé una reducción media de emisiones de carbono (CO2) de unas 6.800 toneladas al año, ya que la voluntad de la Junta y de la Universidad, entidades promotoras, «es que sea algo más grande, que pueda crecer», insistía el rector.

«Es un ejemplo de la Universidad que queremos», ha elogiado el consejero deEducación, Fernando Rey, acerca de una iniciativa que distingue a la UVA como «pionera y labotratorio de buenas experiencias y avances tecnológicos: está marcando el camino hacia el futuro, rompiendo moldes», ha añadido. Para Suárez-Quiñones esta red de calor es paradigma del «compromiso de la Universidad con el Medio Ambiente».