Valladolid

El hallazgo de una mezquita certifica presencia musulmana en Valladolid en el siglo XV

La construcción de viviendas en la céntrica calle Claudio Moyano descubre los primeros restos arqueológicos fuera de Al-Ándalus

El director de Patrimonio de la Junta, Enrique Sáiz, visita el hallazgo de la mezquita
El director de Patrimonio de la Junta, Enrique Sáiz, visita el hallazgo de la mezquitalarazon

El hallazgo de una mezquita certificó la presencia musulmana en el centro histórico de Valladolid. Así lo aseguró el director general en funciones de Patrimonio de la Junta, Enrique Síaz, durante una visita a la zona de los trabajos.

La construcción de un bloque de doce viviendas en el número 5 de la céntrica calle de Claudio Moyano en Valladolid sacó a la luz los restos de la antigua mezquita de la ciudad, un complejo que habría sido construido entre 1411 y 1415 y que fue derribado en el verano de 1506, como consecuencia de los ordenamientos de la prágmática de bautismo obligatorio promulgada en 1502.

Enrique Sáiz indicó que el descubrimiento de los restos que se han puesto al descubierto son el patio de oración, al que se añade otro exterior.

Asimismo, declaró que estos vestigios acreditan la cohabitación, en la capital vallisoletana, de tres comunidades con creencias distintas e incluso antagónicas: cristiana, islámica y judía. La conservación de estos restos «es síntoma de una ciudad inteligente que pone de manifiesto la gran fuerza de la arqueología y no ve en el patrimonio una pega sino un atractivo más, que incluso la configura desde el punto de vista turístico como ha ocurrido en Tarragona, Cartagena o Mérida», puso como ejemplos el representante del Gobierno regional.

También subrayó que este descubrimiento, permitirá «hacer un mapa del Valladolid del siglo XV un poquito más completo que lo que existía hasta ahora». Por ello, el director general de Patrimonio aseguró que «la capital vallisoletana tiene que potenciar más todavía la gran fuerza de una ciudad que es milenaria y que ha sido muy importante en el pasado como evidencian estos restos».

«Una ciudad inteligente es capaz de armonizar. No ve en el patrimonio ninguna pega, sino un atractivo, un recurso más al recurso que tiene la propia edificación arquitectónica contemporánea», añadió.

«Sería muy deseable que Valladolid tuviera una serie de puntos visitables de su historia, desde las bóvedas del Esgueva, necrópolis y el Museo de Valladolid, que alberga toda la historia y todos los bienes muebles que han aparecido en estos lugares». La medievalista y doctora en Historia de la Universidad de Valladolid, Olatz Villanueva, destacó que la mezquita desvela los «únicos restos arqueológicos de una mezquita» que han aparecido hasta la fecha en España del Islam mudéjar, fuera de Al-Ándalus, al norte del Sistema Central.

En ese sentido, aclaró, en declaraciones a la Agencia Ical, que en la cuenca del Duero, al norte del Sistema Central, «nunca hubo una ocupación política de Al-Ándalus, por tanto el Islam que se puede encontrar en esa zona es un Islam mudéjar, vivido en minoría, permitido por la mayoría cristiana castellana».

«Esas mezquitas que se van construyendo donde existe una población musulmana, a veces únicamente sabemos que existieron, otras veces los documentos escritos nos permiten ubicarlos en el parcelario urbano, pero nunca se habían recuperado restos estructurales, arqueológicos, de una mezquita, ni en Castilla y León ni en Aragón», subrayó sobre una comunidad religiosa que «mantuvo su identidad islámica hasta 1502».

Olatz Villanueva indicó que «Valladolid tuvo una comunidad musulmana importante desde los primeros siglos de la Edad Media que, como sucedió en otras ciudades a principios del siglo XV, fueron obligados a recluirse en un barrio propio: la Morería. A partir de entonces, ocupa un solar propiedad del cabildo de la ciudad y en él uno de los primeros edificios que se levanta es lo que ellos llaman el Complejo del Almají, un complejo religioso, de sociabilidad donde estarían tanto la sala de oración como una casa de reunión».