Castilla y León
El sector aeronáutico de Castilla y León, a la cabeza de Europa
La Junta colabora con la mayor iniciativa de innovación en el continente para reforzar el posicionamiento de las empresas de la Región en los mercados
Buenas noticias para la aeronáutico de Castilla y León. La Junta colaborará con la mayor iniciativa de innovación y desarrollo del sector en Europa para facilitar a las empresas de la Comunidad su participación en proyectos conjuntos y la captación de fondos y reforzar su posicionamiento en los mercados.
Así, la consejera de Economía y Hacienda, Pilar del Olmo, firmó un protocolo de colaboración con el director ejecutivo interino de la Empresa Común Clean Sky 2, Tiit Jürimäe.
El Ejecutivo regional se servirá del proyecto europeo para fomentar en la Comunidad el sector aeronáutico y aprovechar las posibilidades del de la automoción, con una implantación más importante en nuestra Comunidad Autónoma.
Clean Sky 2 es el mayor programa aeronáutico europeo de I+D y su principal cometido es desarrollar tecnologías innovadoras para mejorar el comportamiento medioambiental de los aviones y el transporte aéreo mediante la reducción de las emisiones de dióxido de carbono y ruido.
Tiit Jürimäe resaltó la importancia que la Empresa Común concede a la tecnología que apunta a la reducción de las emisiones a la atmósfera cuando hay un incremento considerable del tráfico aéreo.
Según puso de manifiesto la consejera, el acuerdo implica una alianza con la mayor iniciativa tecnológica aeroindustrial de la UE, vinculada al denominado Horizonte 2020 y que cuenta con una dotación de 4.000 millones de euros en el periodo 2014-2020, de los que 2.200 proceden de la industria y el resto de la Comisión Europea.
Además, Pilar del Olmo advirtió que Castilla y León está en condiciones de crear sinergias entre el sector aeronáutico y el de la automoción. Asimismo, recordó Pilar del Olmo que en la Comunidad ya operan ocho compañía del sector que generan un empleo de calidad, con cerca de 700 afiliaciones a la Seguridad Social al cierre de 2016, y una cifra de negocio que asciende a 113,5 millones.
El protocolo, con una duración inicial de cuatro años, pretende crear un marco para facilitar la participación de empresas regionales en las convocatorias europeas del sector y la atracción de fondos europeos para I+D.
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