Fernández Mañueco sólo habla del PP y de la «solidez» de su proyecto

El presidente del PP de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, tiene claro que no quiere entrar en una guerra con Ciudadanos ni mucho menos con la ex popular Silvia Clemente, inmersa ya y durante los próximos días en un proceso de primarias en el que aspira a presidir la Junta.

Y es que en cuanto le preguntan por la noticia que ha convulsionado la política en esta Comunidad, como ayer en Salamanca, el líder de los populares contesta que no habla de este asunto, porque solo le interesa hablar de su partido y de la solidez del proyecto que encabeza, con «centenares de miles de personas que creen en él», dice, para seguir gobernando en nuestra Comunidad otros cuatro años más. Es más, Fernández Mañueco defiende la «libertad» existente en el Partido Popular, «donde cualquiera puede sumarse o bajarse del proyecto cuando lo desee».

El candidato del PP a la Presidencia de la Junta declina realizar cualquier valoración sobre un hipotético pacto postelectoral con una formación naranja liderada por la ex presidenta de las Cortes, con la excusa de que tanto el PP como él «siempre que jugamos un partido salimos a ganar y vamos a por los puntos; después ya veremos lo que hacemos».

El presidente de los populares en Castilla y León insiste igualmente en que en lo que a su persona y responsabilidad afecta ejercerá el liderazgo que le corresponde para llevar al PP a la victoria, primero el próximo 28 de abril en las elecciones generales, y después el 26 de mayo en las autonómicas, municipales y europeas.

Defensa del autonomismo

El líder popular se expresaba así durante la visita que hacía a las obras que se están llevando a cabo en la Estación de Autobuses de Salamanca, donde también se refería, a preguntas de los periodistas, a la comparecencia del ex presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy en el Tribunal Supremo para declarar como testigo en el juicio del proceso que se sigue contra los políticos que declararon la independencia de Cataluña en el Parlamento de esa Comunidad Autónoma.

Fernández Mañueco aprovechaba la cuestión para mostrar su cariño «personal y político» hacia Rajoy así como para reivindicar su figura y legado. «Le debo mucho y le estoy muy agradecido, al igual que millones de españoles por lo que ha hecho por todos nosotros y en defensa de la unidad de España», decía el presidente del PP, mientras acusaba a los dirigentes catalanes que se sientan en el banquillo de los acusados de «querer llevarse el dinero de todos los españoles con la complicidad del Gobierno de Pedro Sánchez». Asimismo, reafirmaba su apuesta y la de su partido por la España autonómica y por ese autonomismo útil y solidario «que encaja a la perfección en la Constitución Española».

«La experiencia autonómica de estos 36 años está demostrando que es válida», decía Fernández Mañueco, mientras insistía en que el objetivo es «recuperar la normalidad en toda España».