Los pescadores de competición piden más espacios para esta práctica deportiva

El nivel de la pesca de competición en Castilla y León es muy alto, ya que cuentan con un Campeón del Mundo y varios de España. Pero sus protagonistas creen que su calidad podría aumentar si contaran con más áreas deportivas. Así lo indica a LA RAZÓN uno de los referentes en nuestra Comunidad, el vallisoletano César Antonio Antón Crespo, siempre en el podio en los campeonatos autonómicos y con buenos resultados a nivel nacional, en lo que a salmónidos se refiere, en la modalidad de mosca o lance. Al respecto, destaca que «Castilla y León tiene los mejores pescadores de competición de España, hay 5.000 kilómetros de ríos trucheros, y sólo cuatro escenarios deportivos, lo que provoca que tengamos muchas limitaciones, que el nivel se resienta, ya que siempre competimos en los mismos espacios y normalmente ganan los que mejor conocen las zonas».

Por este motivo, Antón Crespo demanda a las administraciones mayor apoyo en esta materia para sacar el máximo beneficio a una práctica, que cuenta con numerosos deportistas y muchos seguidores. Y es que, según explica «si contáramos con un mayor número de áreas nuestro nivel subiría y al acoger mayor número de competiciones vendrían deportistas de todos los rincones del mundo que se dejarían mucho dinero, y también serviría para dar a conocer nuestra tierra».

Asimismo, el pescador vallisoletano señala que «el dinero no lo es todo», pero afirma que más ayudas «no estarían mal», ya que «todo corre a cuenta del pescador, lo que también nos limita». «Yo tengo la suerte de contar con la confianza de mi patrocinador ‘‘Moscas Riber’’, que me da todo lo que necesito, que junto a los cursos que realizó y la misma ilusión del primero día, me hace seguir adelante», subraya.

Además, agradece el respaldo de su familia, que «son los grandes perjudicados, ya que les robo mucho tiempo, sobre todo los fines de semana».

Antón Crespo también asegura que las competiciones tipo Open son muy importantes para la autofinanciación de los pescadores, ya que permite «aumentar nuestro reconocimiento internacional y lograr algún premio, que siempre es bienvenido». En este sentido, recuerda con orgullo el triunfo de su club el «Valle Esgueva», en la última competición celebrada en León- Fuímos los primeros vallisoletanos en conseguirlo y poder hacerlo ante equipos locales, de Francia, de Portugal y de toda España», destaca.

Sobre las medidas que las administraciones han puesto en marcha, César Antonio Antón Crespo destaca la unificación de licencias, ya que «evita pagar ocho y te permite pescar en todas esas autonomías, lo que es fundamental para preparar los campeonatos».

Sobre el futuro, se muestra esperanzado y con muchas ganas de que comience una nueva temporada. «En 2016 toca campeonato autonómico en el mes de junio y ya estamos montando señuelos, y desde marzo todos los fines de semana, sí o sí toca ir al río donde se celebra para estudiar la zona», declara. Antón Crespo explica que estar entre los seis primeros en el autonómico es necesario para poder competir en el nacional del siguiente año.

Por último, el pescador vallisoletano, que lleva 21 años con este gusanillo dentro del cuerpo, por culpa de su padre, que después incluso le ha ganado algún campeonato provincial, resalta el nivel de los jóvenes, que «vienen apretando muy fuerte y hace que nuestra preparación sea cada vez mayor para no perder este tren».

La temporada en aguas trucheras en nuestra Comunidad se abrirá a finales del mes de marzo y terminará el 31 de julio

LA RAZÓN- Valladolid

Las provincias de Ávila, Salamanca, Segovia y Valladolid abrirán la veda para la pesca de la trucha el 20 marzo y el resto podrá hacerlo el 3 de abril, si bien la temporada finalizará en todas el 31 de julio. Así lo recoge la orden que establece las normas reguladoras de la pesca en Castilla y León para el año 2016, que se presentó a la Comisión de Pesca del Consejo Regional de Medio Ambiente de Castilla y León, presidida por el director general del Medio Natural, José Ángel Arranz.

Fuentes de la Junta informaron que la orden analizada determina también las especies que podrán ser objeto de pesca así como la gestión que debe llevarse a cabo en el caso de especies no pescables y de especies exóticas invasoras. Además, establece los periodos y días hábiles, tallas, cupos de capturas, cebos y señuelos, procedimientos y artes de pesca para cada una de las especies, así como sus excepciones. Todo ello, dentro de los principios de planificación del aprovechamiento de los recursos piscícolas en términos de sostenibilidad del mismo en cada uno de los tramos.

En el caso de la trucha, con carácter general, el periodo hábil para las provincias de Burgos, León, Palencia, Soria y Zamora abarca desde el domingo, 3 de abril hasta el domingo, 31 de julio, ambos inclusive, mientras para las provincias de Ávila, Salamanca, Segovia y Valladolid se extiende desde el domingo, 20 de marzo hasta el domingo, 31 de julio, ambos inclusive.

La norma autonómica, en consonancia con la Ley de Pesca, contempla que en las aguas trucheras, con carácter general, se practicará la pesca sin muerte, por considerar que en estas masas de agua la trucha, especie de interés preferente, está presente de forma significativa.