Más empleo, mejor atención y plantar cara a la violencia machista

Avanzar en el empleo, mejorar la calidad asistencial que se presta y hacer frente, con recursos y herramientas, a la violencia machista.

Avanzar en el empleo, mejorar la calidad asistencial que se presta y hacer frente, con recursos y herramientas, a la violencia machista. Estas son las principales demandas de las mujeres que sufren alguna discapacidad a las que se trata de dar respuesta en el Congreso «Mujer y Discapacidad» que se desarrolla desde ayer en Ávila, con la presencia de más de una veintena de expertos nacionales e internacionales, y que clausurará hoy la reina Doña Letizia.

Respecto al empleo, la consejera de Familia, Alicia García, aseguraba que para la Junta es una prioridad con el objetivo de que estas mujeres puedan ganar en autoestima y autonomía y plantar cara a la doble discriminación que padecen, por ser mujer y, a la vez, tener una discapacidad.

Y, de cara al futuro, García insistía en su apuesta por la puesta en marcha de itinerarios personalizados para la inserción laboral, así como por la implantación de cláusulas sociales en la contratación pública y por la figura del asistente personal.

«Me hizo crecer como persona y empoderarme», destacaba, por su parte, Asunción Acebes, alumna del curso «Discapacidad intelectual y violencia de género» y ponente de este encuentro, donde relataba su experiencia personal hasta que obtuvo un empleo en el Centro Especial Asprona León, y cómo este puesto de trabajo le ha cambiado su vida para mejor.

Sobre la calidad en la atención, el presidente de Plena Inclusión, Juan Pérez, destacaba la importancia de incidir en la formación así como en la sensibilización de la sociedad ante la situación que padecen muchas mujeres con discapacidad, y pedía que tanto los ciudadanos como las administraciones estén conectados en la puesta en marcha de iniciativas que redunden en el bienestar de estas personas.

De la misma forma, Noelia Cuenca, directora técnica del área de Autonomía Personal de Predif, ponía en valor la figura del asistente personal «porque es el que permite que la persona pueda incrementar su confianza en la toma de decisiones y ser dueña de su vida».

Plantar cara a los abusos y malos tratos que padecen las mujeres con discapacidad es otro de los desafíos de futuro que estuvo muy presente en el debate. Al respecto, la consejera Alicia García recordaba que el 5 por ciento de las víctimas mortales de violencia machista durante el pasado año en España fueron mujeres con discapacidad, y que en Castilla y León, en los últimos tres años, se han registrado como víctimas de violencia de género a 435 mujeres con discapacidad, el 10 por ciento del total. Otros estudios que se ponían encima de la mesa en este congreso revelan que siete de cada diez mejores con discapacidad intelectual menores de 18 años habían sufrido abusos sexuales. Frente a esta lacra, la profesora de la UNED, Belén Gutiérrez, advertía de que muchas de estas mujeres no saben cómo detectar los abusos sexuales y malos tratos que padecen y por ello apostaba por dotarlas de las herramientas necesarias para que puedan identificar estas situaciones cuanto antes.

El ocio y la cultura tenían también su protagonismo en esta jornada y, en este sentido, Cristina Larraz, responsable de Arquitectura y Accesibilidad de Ceapat, reconocía los avances sociales en materia de accesibilidad cognitiva, especialmente para personas mayores y con discapacidad, pero apostaba por mejorar la información que proporciona el entorno en campos como la lectura fácil, la arquitectura centrada en la persona o la señalización, para seguir avanzando en la calidad de vida de estas personas.