Castilla y León

Villarrubia defiende a los sindicatos y busca su complicidad en política

La Razón
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Dos meses después del Comité Extraordinario que el PSOE celebró para elegir a los socialistas de esta tierra que participarían en la Conferencia Política del PSOE, Julio Villarrubia se subía ayer de nuevo al estrado ante toda la plana mayor del socialismo regional para indicar a los suyos el camino a seguir en los próximos meses, con las elecciones europeas a la vuelta de la esquina.

El secretario regional del PSOE presentó un documento con 200 propuestas, fruto del trabajo de todo un año de los socialistas encaminadas a «resolver los problemas de las personas». Un texto, que incluye iniciativas en todos los ámbitos, que será la hoja de ruta de los socialistas, y que llevarán a lo largo y ancho de la Comunidad. Un documento, con el que el PSOE, consciente -en palabras del propio Villarrubia- de que aún le queda mucho trabajo para ser alternativa de Gobierno en Castilla y León. con el que pretende eso, que la genta sepa y vea que son una opción más que fiable y creíble para llevar el timón de esta Comunidad. Durante sus casi 50 minutos de exposición, Julio Villarrubia habló de todo un poco. De recortes sociales, de pérdida de calidad democrática, de falta de expectativas, de apoyo al municipalismo contra una reforma local que rechaza y le preocupa... Pero, sobre todo, dio la cara por los sindicatos de clase como son UGT y CCOO, ante las informaciones que están apareciendo en la prensa sobre sus actuaciones con el dinero público que reciben. Es más, Villarrubia aseguró que el PSOE necesita a los sindicatos, pero también a las organizaciones agrarias, cooperativas y asociaciones de todo tipo para llevar a cabo sus actuaciones y reivindicaciones.

La desafección de la ciudadanía con la política centró la parte final de su intervención, en la que pidió a los políticos, en general, y al Gobierno y a la Junta, en particular, más transparencia, honradez y que prediquen con lo que dicen. Y consideró, como reflexión personal, que para recuperar esta credibilidad perdida con la gente, es más importante el comportamiento diario, el colectivo de todos, dijo, que las propuestas o las palabras.