Sanidad

Aplican una terapia pionera en el cáncer de pulmón inoperable

La técnica consigue más que duplicar la supervivencia

La Razón
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Es el cáncer que más vidas se lleva por delante en el caso de los hombres y, en el de las mujeres, la incidencia ha aumentado en los últimos años

Es el cáncer que más vidas se lleva por delante en el caso de los hombres y, en el de las mujeres, la incidencia ha aumentado en los últimos años un 5,2 por ciento, más que en otro tipo de tumor. Su localización y otras patologías, como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), conllevan que, en el 20 por ciento de los casos en los que, a pesar de que el cáncer de pulmón se haya detectado pronto, no se pueda operar. Sin embargo, desde el año 2008, el Instituto Catalán de Oncología, viene aplicando una nueva terapia cuyos resultados presentó ayer y que son, cuanto menos, esperanzadores.

El tratamiento convencional para este tipo de cáncer se basa en dos fases. La primera consiste en extirpar la totalidad del tumor, y en su defecto, la mayor parte. Tras la cirugía, el paciente debe someterse, durante seis o siete semanas, a sesiones de quimioterapia y/o radioterapia para eliminar el resto de células cancerígenas. Pero no siempre es viable la intervención quirúrgica, por lo que los enfermos quedan a merced de la efectividad de las terapias radiológica o química para controlar el tumor, con los efectos secundarios que ello supone.

Es, precisamente, con el objetivo de disminuir la toxicidad de los tratamientos y aumentar su eficacia que la investigación y el desarrollo de nuevas tecnologías aplicadas a la salud buscan ser cada vez más precisas y atender a las especificidades de cada paciente. Y, es esto lo que el equipo del ICO liderado por Ferran Guedea, jefe del Servicio de Oncología Radioterápica, ha querido testar.

Hace cuatro años, los médicos comenzaron a tratar a unos 80 pacientes aquejados de un cáncer de pulmón inoperable, cuya supervivencia está alrededor del 30 por ciento a los 2 años, con una nueva terapia. Les aplicaron radioterapia estereotáxica extracraneal, una técnica pionera que permite focalizar, con gran precisión, altas dosis de radiación en la zona afectada, evitando así dañar al tejido sano. «Aplicar radioterapia a un hueso, por ejemplo, es relativamente sencillo pero el problema es aplicarla a un órgano que se mueve, como el pulmón». La terapia permite, además, sincronizar la irradiación con la respiración, por lo que «el error es de un milímetro», destacó Guedea.

«Un cifra muy alta»

El tratamiento, más corto en el tiempo –dura tres semanas–, es mucho menos nocivo que el convencional por lo que los efectos secundarios no son tan duros. Y, sobre todo, ha demostrado, en 43 pacientes (los primeros resultados que se obtienen), que la supervivencia a los dos años alcanza casi el 80 por ciento (79,1 por ciento) y lograr que el tumor quede controlado localmente en el 96,4 por ciento, lo que según los expertos, es «una cifra muy alta». Estos resultados son similares a los obtenidos con la cirugía, explicó el médico., «aunque la primera opción siempre es la cirugía».

Las conclusiones son tan prometedoras que la técnica ya se aplica en otros tipos de cáncer.