Colau ampliará la moratoria hotelera a más barrios para ganarse a ERC y CUP

La moratoria hotelera que implantó la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, al llegar a su nuevo cargo toca a su fin. En junio expira pero el distrito de Gracia se quedará sin protección en un par de meses, por lo que a la alcaldesa le urge sacar adelante la nueva normativa.

La moratoria hotelera que implantó la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, al llegar a su nuevo cargo toca a su fin. En junio expira pero el distrito de Gracia se quedará sin protección en un par de meses, por lo que a la alcaldesa le urge sacar adelante la nueva normativa. No obstante, Colau y su partido tienen que nadar entre dos aguas. Por un lado, los que le piden mayor flexibilidad en la moratoria -PP, CiU y Ciutadans- y, por otro, los partidarios de aumentar la protección en determinados barrios, como ERC o la CUP. Con el inconveniente de que si Colau gira demasiado a la izquierda, sus socios de gobierno, el PSC, puedan decantar en su contra la votación de la medida que, presumiblemente, se llevará a pleno a finales de este mes. En cualquier caso, El gobierno municipal anunció ayer su intención de ampliar la prohibición hotelera a los barrios de Poblenou, Hostafrancs y Sant Antoni como un guiño, precisamente, a ERC y la CUP.

La teniente de alcalde de Urbanismo, Ecología y Movilidad del Ayuntamiento de Barcelona, Janet Sanz, explicó, en una entrevista a El País, que el Consistorio ampliará la zona de decrecimiento turístico prevista en el nuevo Plan Especial Urbanístico de Alojamientos Turísticos (Peuat). En concreto, los límites de la zona se ampliarán a los barrios de Poblenou, Hostafrancs y San Antonio, tal como habían pedido ERC y la CUP esta misma semana. Sin embargo, el acuerdo con los republicanos sigue pendiente de otras condiciones, como la consulta ciudadana que ha propuesto ERC para detener tres hoteles que generan rechazo, a la que Sanz respondió que es «inejecutable». Para la teniente de alcalde, la consulta plantea «muchas dudas jurídicos» y podría conllevar indemnizaciones para los promotores que podrían superar los 100 millones de euros de dinero público.

Sanz también detalló que están estudiando si eliminar la prohibición de hacer grandes reformas en los hoteles del centro. «Es una de las peticiones del Gremio y lo han planteado muchos grupos», dice Sanz. A su juicio, «es una cuestión de concepto» que «pronto se concretará». La teniente de alcalde de Urbanismo también aclaró que la propuesta de dar licencias para pisos turísticos en la zona 3, más alejados del centro, y en edificios segregados de las viviendas residenciales, sólo se podrá plantear «si se recupera el régimen para otorgar y retirar licencias», que actualmente es competencia de la Generalitat.

La CUP, por su parte, reiteró sentirse «decepcionados» con el Peuat a pesar de haber sus esfuerzos «hacia el decrecimiento». Por ello, calificaron el proyecto de «insuficiente» y, a estas alturas, se decantan por la abstención ya que no aprobar el Peuat llevaría a «una situación de barra libre» hotelera en toda la ciudad. El gobierno, sin embargo, necesita más apoyos.