Política

Barcelona

El Govern gravará los pisos vacíos en manos de bancos y promotores

Esquerra impuso esta medida en el pacto de gobernabilidad que firmó con CiU

El conseller Vila anunció ayer la medida del Govern
El conseller Vila anunció ayer la medida del Governlarazon

No sólo el proceso soberanista ilustra la influencia de ERC sobre el Govern de Artur Mas. Los republicanos firmaron un pacto de gobernabilidad con la condición de celebrar una consulta en el año 2014, sí, pero también con el requisito de llevar a cabo un giro a la izquierda. Ese viraje podrá visualizarse con toda claridad una vez se conozca el proyecto de presupuestos de la Generalitat para 2013, aunque ya existen pistas muy claras sobre el cambio de orientación. Las ofreció ayer el consejero de Territorio y Sostenibilidad, Santi Vila, que anunció la intención de la Generalitat de gravar con un impuesto las viviendas vacías en manos de la banca y de los promotores. El objetivo de este aumento de la presión fiscal, explicó Vila (un consejero encuadradado en el ala más socialdemócrata de Convergència), es forzar el alquiler.

Lo cierto es que no existen demasiadas concreciones sobre la medida de la Generalitat. Tan pocas que incluso Mas, de viaje en Bruselas, se apresuró a decir que el impuesto todavía «se está estudiando». El Govern evitó de esta manera ofrecer cifras sobre cuánto espera recaudar con este nuevo tributo. Únicamente precisó que existen 80.000 pisos nuevos vacíos, aunque la cifra asciende a 450.000 si se cuentan también los de segunda mano.

A falta de conocer la letra pequeña del impuesto sobre pisos vacíos –que no afectará en ningún caso a particulares– ,Vila explicó cuál es el propósito de esta impuesto. «Es una medida que procurará estimular el sector de los viviendas bloqueadas. Es absolutamente imprescindibles poder destinarlas al marcado de alquiler», dijo el conseller.

Los sectores afectados evitaron expresar su opinión a falta de conocer más detalles. Sí que se produjo, en cambio, la respuesta política. Esquera, bien informada sobre las intenciones de la Generalitat, explicó queel impuesto sólo se aplicará sobre «los pisos procedentes de ejecuciones hipotecarias de los últimos 10 años». El tipo, aún en el aire, variará en función del valor catastral de las viviendas. El PSC calificó la medida de «positiva pero insuficiente» e ICV la vio «cínica».

Por su parte, el PP fue el único que arremetió contra este impuesto y subrayó que estos pisos se pueden alquilar sin necesidad de subir impuestos.