Iceta cierra la puerta a Junqueras y Puigdemont

El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, quiso borrar ayer de un plumazo cualquier asomo de tripartito y, de paso, reivindicar un poco más su perfil de partido constitucionalista, puesto bajo sospecha tras el acuerdo con la formación heredera de Unió, Units per Avançar. Así, el líder socialista desterró la posibilidad de pacto postelectoral con ERC y el PDeCAT y exigió a los «comunes» que abandonen el referéndum de independencia, mientras el PP reclamaba por carta a PSC y C’s que se comprometan antes del 21-D a no formar parte de un Govern con fuerzas separatistas, a no apoyar ningún tipo de plebiscito secesionista y, si dan los números, a formar un gobierno constitucionalista. La oferta del líder popular, Xavier García Albiol, obtuvo la aprobación oral del partido naranja, pero no de los socialistas.

«Yo no haré presidente ni a Oriol Junqueras ni a Carles Puigdemont», avanzó ayer Iceta en la presentación del libro «Iceta, el estratega del Partido Socialista», del periodista Raúl Montilla, y añadió que tampoco los haría aunque renunciasen a sus aspiraciones de proclamar la independencia. «Son los responsables de habernos llevado a esta situación desastrosa», argumentó, con el objetivo de desmontar todas las acusaciones vertidas en los últimos días sobre su posible inclinación a reeditar la coalición de gobierno con ERC e ICV –ahora, «comunes»–. Pero Iceta no se quedó ahí e interpeló también a Catalunya en Comú, la candidatura liderada por Xavier Domènech, para tenderle la mano si aparca el referéndum «para separar» y apuesta por uno que permita una mejor convivencia tras la reforma del Estatut y la Constitución.

En síntesis, el líder socialista vino a suscribir los tres puntos de la propuesta que ha hecho llegar Albiol para que sean incluidos en los programas electorales de los tres partidos constitucionalistas, aunque por el momento se ha mostrado muy reacio a hablar de pactos con el argumento de erradicar la coyuntura de «frentes» que ha instalado el «procés» para el 21-D. Algo que no comparte Albiol, que ayer hizo llegar este planteamiento por escrito –todavía no ha recibido respuesta– para obligar a posicionarse a cada formación: «Los catalanes deben saber claramente hacia dónde irá cada partido», exigió. Asimismo, Albiol ve a ERC y PDeCAT reculando en su proyecto rupturista tras reconocer la falta de preparación para poner en marcha la independencia, y eso, según el líder popular, «deja sin autoridad a sus líderes para pedir el voto en los comicios. Están inhabilitados para seguir gobernando».

Aunque no por escrito, sí oralmente, obtuvo la aprobación del secretario de Comunicación de C’s, Fernando de Páramo. Precisamente, la formación naranja fue la primera en poner a debate los pactos, que ha intentado arrancar otro compromiso de los partidos constitucionalistas, que es apoyar a la lista más votada en caso de que tenga opciones de gobernar. De Páramo, también, se abrió a hablar con los «comunes» para acuerdos postelectorales y denunció ante la Junta Electoral a TV3, pidiendo más neutralidad para 21-D: «Es Telepuigdemont».