Barcelona

Mas ignora las advertencias de Rajoy

Desprecia los argumentos del presidente en contra de negociar la consulta porque son «antiguos» y propios de políticos del pasado

Artur Mas, acompañado del conseller de Economía y el alcalde de Barcelona inició su viaje a Israel
Artur Mas, acompañado del conseller de Economía y el alcalde de Barcelona inició su viaje a Israellarazon

BARCELONA- ¿Con una diferencia de cuatro horas, el tiempo que tarda en llegar un vuelo de Barcelona a Tel Aviv, el president de la Generalitat, Artur Mas, respondió a las advertencias que Mariano Rajoy lanzó ayer a los soberanistas desde Córdoba, que «la Constitución es irreformable en cuestión de soberanía» y que estas cuestiones ni siquiera pueden ser objeto de diálogo. Desde Israel, donde ha viajado con una delegación empresarial para estrechar lazos comerciales y encontrar aliados a su proyecto nacionalista, Mas replicó al presidente del Gobierno que los argumentos que ha ofrecido para negarse a dialogar sobre la posibilidad de reformar la Constitución para encontrar una salida al problema catalán son «antiguos» y propios de políticos del pasado.

En el discurso de clausura del cónclave interparlamentario del PP, Rajoy echó mano de la lírica para denostar al independentismo. Alegó que «no hay que poner aduanas entre los sentimientos que unen a los catalanes y a los españoles». Y Mas, a 3.070 kilómetros de distancia, le replicó que hablar de aduanas y fronteras «es un lenguaje antiguo, del siglo XX y de antes de entrar en la Unión Europea (UE)». «¿Por qué habla de aduanas, si no tenemos?», se preguntó.

Al president de la Generalitat la metáfora de Rajoy le pareció desafortunada. Recordó al jefe del Gobierno que la UE «evoluciona», que «sobre todo se incorporan países nuevos y no desaparece jamás ninguno» y que cuando se amplía la unión «nunca se habla de aduanas, aranceles, barreras o fronteras», sino que se habla de «cómo ayudar a integrar mejor un espacio europeo».

Mas volvió a insistir en la necesidad de dejar que un pueblo, como el catalán, que tiene un proyecto mayoritario «se pueda expresar en las urnas». «Esto es lo que se espera de una democracia madura», reiteró.

Emplazó al presidente del Gobierno a dejarse de fronteras y a dialogar sobre las «esperanzas» y «proyectos» de Cataluña.

Mas pidió al PSOE su complicidad para facilitar el diálogo con el presidente del Gobierno. Reclamó al secretario general de los socialistas, Alfredo Pérez Rubalcaba, y al primer secretario del PSC, Pere Navarro, «seriedad y sentido de Estado», que se pongan de acuerdo y sean capaces de ofrecer a Cataluña «alguna cosa de la cual valga la pena hablar», porque si no su propuesta «no será más que una utopía o cantos de sirena», tal y como insinúa Rajoy.

Desde Cataluña, el portavoz del gobierno catalán, Francesc Homs, también se dirigió al PP y al PSOE para preguntarles «por qué tienen tanta alergia a la democracia y a que se pueda consultar al pueblo de Cataluña». Pidió a Rajoy que aparque sus constantes negativas a dialogar con Cataluña sobre el derecho a decidir y ofrezca una respuesta democrática. Y le aclaró que celebrar la consulta no es sinónimo de independencia ni de una victoria del «sí».

Divergencias entre CiU y ERC

El rifirrafe con populares y socialistas dejó en segundo plano los encontronazos que CiU y ERC han tenido esta semana por la consulta, por la pregunta y la fecha, que están negociando, y por una moción de la CUP que proponía al Govern apoyar un referéndum de autodeterminación sin permiso del Estado. ERC votó a favor y CiU, en contra.

«Israel muestra que Cataluña es viable como país»

Desde Tel Aviv, donde inició su viaje, Artur Mas reivindicó que el éxito de Israel demuestra que Cataluña es viable como país. Si bien no quiso comparar los procesos políticos, porque hay diferencias entre la forma en que se creó el estadó israelí y el proceso catalán, destacó que tienen un PIB per cápita , una población y una extensión similares. Admitió que habrá contactos institucionales y negó problemas con la diplomacia española.