Barcelona

Vila desata la ira de Unió al decir que está más cerca de ERC que de Duran

«¿Será que tiene en la cabeza la federación de Convergència i Esquerra?», ironiza UDC

Vila desata la ira de Unió al decir que está más cerca de ERC que de Duran
Vila desata la ira de Unió al decir que está más cerca de ERC que de Duranlarazon

"Junqueras ha hecho una cosa muy buena que es sintonizar con un malestar y con el convencimiento de una época que se acaba», ha asegurado el conseller de Territorio y Sostenibilidad, Santi Vila.

No sólo se sabe que hay un sector de Convergència que prefiere los pactos con Esquerra antes que los pactos con Unió, sino que este sector cada vez es más visible. El conseller de Territorio y Sostenibilidad, Santi Vila, lo verbalizó ayer sin complejos. «En determinados planteamientos me siento más cerca de Oriol Junqueras que de Duran Lleida», afirmó Vila en una entrevista en Rac 1. Puestos a sincerarse, el conseller confesó que el líder de Unió juega, hoy por hoy, «un papel que no tiene que ver con el momento que vivimos». En este sentido, Vila añadió que comparte en mayor medida la diagnosis de Junqueras respecto al momento actual que no la de Duran Lleida.

Las palabras del dirigente convergente irritaron a Unió Democràtica, muy suspicaz porque es perfectamente consciente de que el socio mayoritario de la federación nacionalista cada vez está más escorado hacia ERC. «Sorprende que Santi Vila vea al jefe de la oposición como el futuro. ¿Será que tiene en mente la nueva federación de CiE (Convergència i Esquerra)?, dijo la portavoz de Unió, Montse Surroca, desde su cuenta de Twitter.

El desprecio

Fue sólo la primera parte de un goteo de reacciones por parte de dirigentes de Unió. El vicesecretario general de UDC, Toni Font, despreció la política de declaraciones y trató de quitarle hierro. «Afortunadamente en el paso del tiempo, lo que es pasado y lo que es futuro, no depende de declaraciones a un micrófono de radio; y por muchos años», dijo.

El senador y dirigente de Unió Salvador Sedó, por su parte, calificó de «curioso y significativo, como mínimo» que «un miembro del Govern diga que Junqueras es el futuro». Y el eurodiputado Francesc Gambús utilizó también Twitter para manifestar su sorpresa: «Pontificar sobre los efectos del paso del tiempo no debería ser la prioridad de un miembro del Govern; menos aún para abrazar nuevos líderes fuera de CiU».

Lo cierto es que las palabras de Vila podrían provocar una enorme irritación de Duran, un dirigente que tiende a no morderse la lengua cuando se trata de plantar cara a los voces de Convergència que le cuestionan. Pocas veces se produjo un cuestionamiento tan explícito como el de ayer, particularmente hiriente por la contraposición con el presidente de ERC. «Junqueras ha hecho una cosa muy buena que es procurar sintonizar con un malestar que hay en la ciudadanía y con un convencimiento de que hay una época que se acaba», afirmó el conseller de Territorio.

La polémica entre Unió y Vila no hacen otra cosa que aflorar el pulso de fondo que mantienen los socios de la federación nacionalista. Unos y otros mantienen un grandes discrepancias respecto al desenlance del proceso soberanista y, por el momento son incapaces de trazar las líneas maestras del programa electoral. Aparentemente debería ser imposible, puesto que la dirección de Unió no es independentista, a diferencia de la de CDC.

Las palabras de Vila expresando su proximidad respecto a Junqueras se producen pocos días después de que censurara a ERC por forzar la comparecencia de Artur Mas ante la comisión de investigación del caso Pujol. El conseller definió aquella maniobra como una «puñalada», ya que, en su opinión, es un «error táctico» para impulsar el proceso.

Por otra parte, el conseller descartó igualmente la posibilidad de postularse como candidato a la presidencia de la Generalitat y aseguró que «nunca» se lo ha planteado. «Espero que Mas esté convencido de que soy uno de sus consellers que le ayuda de verdad», afirmó.

. El titular de Territorio se ha referido igualmente a la querella presentada contra Artur Mas por la celebración del 9N y pronosticó que «acabará en nada porque no hay ninguna base que justifique una querella contra el presidente de Cataluña por haber hecho posible que la gente opine».

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