Barberá insiste en acusar al PSOE del freno de la dársena

- Los «miles de personas» que visitaron este fin de semana la marina de Valencia demuestran que, si esta zona estuvo años paralizada, no fue por cuestiones económicas, sino por falta de voluntad política, concretamente del Gobierno socialista de Zapatero, según denunció ayer la alcaldesa Rita Barberá.

A la espera del traspaso oficial del suelo de la dársena, el Consorcio que la gestiona sigue sin dinero, pero la diferencia entre el limbo organizativo de entonces frente a la actividad reciente es que el actual director del Consorcio, Pablo Landecho, «tiene voluntad política» y su apoyo y el de la Generalitat para darle vida al puerto.

Barberá realizó estas declaraciones tras recibir como obsequio la bandera de España que ondeó en el cuartel general del Mando Conjunto de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad de la OTAN durante el año en que el contingente español ha estado destinado en Afganistán. El general Javier Cabezas, al mando de la misión en Kabul, explicó que buscaron un recuerdo personal para la que consideran una «mujer valiente» y que, tras descartar el lapislázuli típico de la zona para no «esquilmar el país» de su riqueza natural; las armas, por ser un recuerdo «que se podía prestar a interpretaciones maliciosas» y el burka, por representar «la esclavitud de la mujer afgana», se decidieron por una típica pashmina.