El galimatías de Bankia

Comenzó ayer el macroproceso de la salida a bolsa de Bankia, en el que hay incluidos un buen número de valencianos como corresponde al hecho de que Bancaja fue una de los dos principales protagonistas para componer el puzzle de Bankia. La otra era Caja Madrid.

Muchas incógnitas se abren en torno a este juicio. La primera, la petición de la propia Bankia de que se suspenda definitivamente el juicio porque la práctica totalidad de los accionistas y, por tanto, de los afectados, ya les ha sido devuelto el dinero, hasta un total de 1.900 millones de euros. La otra, porque la salida a bolsa se hizo con los parabienes del Banco de España y de la Comisión Nacional del Mercado de valores y de la empresa auditora Deloitte. Ninguno de los responsables de estos tres organismos y de la citada empresa se encuentra entre los imputados.

Frente a ellos, la querella presentada en su día por UPyD, tras la que el juez Andreu decidió la apertura del juicio oral al entender que existen indicios indicadores de que los administradores aprobaron unas cuentas maquilladas que no reflejaban la realidad de la situación del banco.

Ahora se trata de demostrar si hubo engaño intencionado o no. Todo un galimatías. A su favor los acusados cuentan con que los expertos afirman que los daños están resarcidos, y que no hubo ánimo de lucro en esa salida a bolsa. No es lo que dice la acusación. Un debate, por otra parte, que ni siquiera los peritos del Banco de España coinciden. Mi amigo Rogelio se inclina por lo que le señalan sus fuentes: la ausencia de condenas.

En fin, a ver qué sucede finalmente. Si se mantiene el juicio, va para largo, para unos meses. Esperemos acontecimientos. Así es la vida.