El juego «on line» crece un 20 % durante la crisis en Valencia

La crisis aprieta por todos lados y, a falta de un puesto de trabajo, los jóvenes caen en alguna «trampa» para obtener dinero. Tanto, que las apuestas a través de Internet crecieron un 20 por ciento en los últimos cinco años en Valencia. Así lo confirmó a LA RAZÓN la psicóloga responsable del Instituto Valenciano de Ludopatía y Adicciones No Tóxicas, Consuelo Tomás, quien añadió que los juegos de azar vinculados con el deporte y con cartas, como el póker, son los que más han aumentado. Son las que más casos de ludopatía están generando en la región.

Además de una legislación favorable al juego de azar, la responsable señaló que el gran crecimiento de este tipo de apuestas se debe fundamentalmente «a las facilidades que ofrece la red para jugar» y denunció la gran promoción y publicidad de las empresas que se dedican a las apuestas en «medios de consumo masivo como la televisión».

Tomás apuntó que han percibido un cambio en el perfil de los afectados y destacó que en Valencia la ludopatía afecta fundamentalmente a chicos jóvenes con estudios medios o superiores. La psicóloga anotó que el nivel de formación influye a la hora de crear la adicción, ya que «las personas creen que su inteligencia va a influir en los resultados y no tienen en cuenta que se trata de juegos de azar en los que sus conocimientos no pueden intervenir para garantizar una victoria».

Sin embargo, pese a que desde el Instituto Valenciano de Ludopatía constatan un aumento de los casos de adicción por apuestas a través de la red, durante el año 2012 se observó una disminución en los avisos totales por ludopatía tal y como comunicó la Conselleria de Bienestar Social.

Así, se registraron 117 notificaciones menos que en el año 2011, lo que supone un descenso del 29,47 por ciento. Los datos de asistencias por ludopatía en los servicios sanitarios de la Comunitat Valenciana muestran el mantenimiento de la tendencia descendiente iniciada en 2009, cuando se alcanzó el pico de atenciones con 672 casos.

El primer paso

Para salir de la espiral del juego es esencial que el afectado reconozca que tiene un problema. Tomás alegó que muchas veces la persona que tiene la adicción acude presionado «para conseguir dinero de su familia o lavar su imagen». Generalmente, es su entorno el que percibe el problema porque «el afectado empieza a tener problemas económicos y a mentir», añadió la psicóloga.

No obstante, que el circulo del ludópata detecte la adicción al juego no es suficiente, ya que «es esencial que el jugador reconozca la situación en la que se encuentra para empezar el tratamiento». Desde el instituto confirmaron que «tienen muy buenos porcentajes de recuperación».