Finanzas
El Síndic detecta 306 millones de facturas «en el cajón» en 2011
Moragues asegura que el informe reconoce que han disminuido
Las conocidas como facturas «en el cajón» son uno de los principales problemas de la Administración valenciana. Son aquellas que, no solamente hay que pagar, sino que hay que contabilizar e imputar en algún presupuesto. El informe de la Sindicatura de Cuentas de 2011 refleja un total de 306,5 millones de euros en facturas de este tipo durante dicho ejercicio, que técnicamente se denominan obligaciones no reconocidas.
De esa cantidad, 77,7 millones corresponden a gastos sanitarios (en 2010 fueron muchos más, concretamente 1.343 millones de euros) y 228,8 a gastos de farmacia pendientes de contabilizar en el presupuesto de dicho ejercicio.
Además, el Síndic en su informe, que entregó ayer al presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, insta a la Administración valenciana a imputar a sus presupuestos correspondientes un total de 1.872,2 millones de euros derivados de algunos contratos, convenios y acuerdos que no están presentes ni justificados en el listado de los compromisos de pago con cargo a otros ejercicios posteriores.
Más transparencia
Por su parte, el conseller de Hacienda y Administración Pública, Juan Carlos Moragues, explicó en referencia a este informe, que reconoce el esfuerzo que está hacienda la Generalitat por reducir el déficit y el gasto público. Con respecto a las facturas «en el cajón», recordó que el documento muestra como estas han disminuido y se ha tenido una actuación más «transparente».
Además, hizo hincapié en que el nuevo Registro Unificado de Facturas permite incrementar el control sobre estos gastos.
Moragues, en su primera aparición pública tras la reunión del pleno del Consell, analizó el informe del Síndic, que concluye también que la Generalitat experimentó en 2011 un «importante deterioro» de su fondo de maniobra, que fue negativo en 15.525 millones de euros.
La Sindicatura, según Moragues, pone de manifiesto «el cumplimiento con la legalidad» por parte de la Administración valenciana, que no incurre en el supuesto de responsabilidad contable.
El informe, según el conseller, «pone el énfasis en el descenso y la contención del gasto y del déficit público y da importancia al hecho de que se esté reestructurando el sector público empresarial». También señaló que la Sindicatura reconoce expresamente «el importante aumento de los gastos sanitarios junto con los problemas estructurales derivados de una financiación insuficiente del sistema sanitario valenciano».
Lo cierto es que la propia Sindicatura señala que el gasto en la asistencia sanitaria sigue siendo el de mayor peso en el presupuesto, ya que en 2011 se reconocieron obligaciones por importe de 5.604,2 millones de euros.
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