Barcelona

Ferrmed, vigilante ante las dudas que suceden al inicio de obras del Corredor

A. Martí

La Razón
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Si la ministra de Fomento, Ana Pastor, cumple a pies juntillas su palabra, en menos de quince días deben estar en marcha las obras para adaptar al ancho europeo el Corredor Mediterráneo. La Conselleria de Infraestructuras ha mostrado en varias ocasiones su satisfacción por la respuesta del Ministerio. Prácticamente todos los tramos entre Valencia y Barcelona están adjudicados. Sin embargo, todavía hay muchas dudas sobre esta infraestructura.

Desde Ferrmed, asociación creada para la defensa de este Corredor, advierten de que hay un importante número de cuestiones todavía no resueltas. Francisco García Calvo, miembro del equipo técnico de Ferrmed y de la junta de Gobierno del Colegio de Ingenieros Industriales de la Comunitat, incide en la necesidad de homogeneizar la normativa técnica europea en materia de ferrocarriles para evitar que los trenes puedan tener problemas conforme vayan llegando a países europeos. Para entender mejor la importancia de este asunto, García Calvo explicó que sería como si las ITV de los vehículos españoles no tuviesen validez fuera de España e insistió en que «hay que asegurarse de que las locomotoras podrán pasar sin problemas».

Incidió en que es imprescindible que el Ministerio de Fomento diga cuanto antes la fecha de fin de las obras. Hasta ahora, Pastor únicamente ha confirmado que Valencia, incluida la factoría Ford de Almussafes estará conectada por ancho internacional en 2015 y Alicante en 2016.

Solo con mayor concreción las empresas podrán comenzar a preparar sus planes de exportación. Las agroalimentarias están especialmente interesadas porque podrán dar una salida mucho más rápida a sus productos. Ferrmed ha creado un grupo específico de trabajo sobre este asunto.

García Calvo también advierte de la necesidad de que los operadores que exploten este corredor se unifiquen a través de un único interlocutor.

Las empresas también necesitan conocer cuántas estaciones intermodales habrá para planificar sus rutas, así como los «surcos» (horarios) de los que dispondrán las mercancías dentro de la vía que, de momento, compartirán con los trenes de pasajeros.