La Concertada dice que Marzà mezcla cifras y que ha eliminado once unidades

La Mesa por la Educación en Libertad denunció ayer que el conseller de Educación Vicent Marzà mezcla las cifras del denominado «arreglo escolar» de las unidades de la educación Concertada, y que la realidad es que ha suprimido 31 y ha concedido veinte. Pero algunas de estas veinte son las lógicas por el crecimiento vegetativo de los alumnos, es decir, que computa como unidad nueva a los alumnos que pasan a primero de Primaria después de haber cursado Infantil, es decir, pasan de curso en una línea ya concertada.

Además, Marzà no ha otorgado 206 peticiones de unidades nuevas a la concertada, mientras ha creado 496 unidades en la educación pública, con el argumento de que son las que se han ido cerrando en los últimos años con los gobiernos del PP, sin reparar en que estas líneas se clausuraron porque no tenían alumnos.

Vicente Morro, de la Federación Católica de Asociaciones de Padres de alumnos (FCAPA); y José Manuel Boquet, de la Federación de Centros de Enseñanza de Valencia (FECEVAL), explicaron que si el 52 por ciento de los padres en la ciudad de Valencia demanda Educación Concertada será por algo, y que «yo no he visto en el colegio de mis hijos a un empresario perverso intentando chuparme la sangre», sentenció Morro. Boquet dijo que el colegio concertado «se presenta todos los años a las elecciones» porque si no consigue tener padres interesados en que sus hijos estudien en ese centro, el colegio cierra y los profesores se quedan sin trabajo. En la educación pública no pasa eso, el profesor lo es para toda la vida. A lo mejor por eso, la calidad de la concertada es mayor».

Por otra parte, la Mesa para la Educación en Libertad anunció que formará una cadena humana el próximo día 2 de junio para «abrazar» a la Generalitat, en defensa de la educación Concertada, también de cero a tres años.

El «abrazo» se llevará a cabo el próximo día 2 de junio a las 19.30 en la plaza de Manises de Valencia.

Los miembros de la Mesa explicaron que hace 18 días que Marzà tiene una petición encima de la mesa para celebrar un encuentro público en un sitio neutral y abordar abiertamente estos temas con luz y taquígrafos, pero que el conseller aún no había contestado a esta petición y apenas se ha reunido veinte minutos con ellos.