Política
La Diputación de Valencia concedió 9.000 euros al congreso pro soberanista de marzo
El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, optó por no acudir a un cónclave que el PP calificó de «aquelarre nacionalista»
La Diputación de Valencia aprobó la aportación de 9.000 euros a la celebración del congreso «L’ hora de les decisiones, infraestructures, finançament i sectors econòmics. Balanç de greuges i reivindicacions conjuntes» celebrado el pasado 2 de marzo por la Asociación Ignasi Villalonga, un cónclave al que el propio presidente de la Generalitat, Ximo Puig, decidió no acudir por el carácter pro independentista del mismo.
El importe supone la suma de lo aportado por la Diputación de Barcelona (6.000 euros) y la de Tarragona (3.000 euros).
El decreto de pago tiene fecha de 9 de agosto y está firmado por el vicepresidente segundo de la Diputación y diputado de Hacienda, Toni Gaspar, que en ese momento, estaba de presidente en funciones.
El documento al que ha tenido acceso LA RAZÓN justifica que la concesión otorgada se enmarca dentro de «las subvenciones de concesión directa por razones de interés público, social, económico o humanitario u otras debidamente justificadas».
La celebración del congreso, que el PPCV calificó de «aquelarre nacionalista» estuvo rodeada de polémica. Enmarcado en el ámbito de la denominada Euroregió de l’Arc Mediterrani (Euram), se dio por confirmada la presencia del presidente de la Generalitat Ximo Puig y de su homólogo catalán, Carles Puigdemont; balear, Francina Armengol y aragonés, Javier Lambán.
A estos, se añadían participantes de regiones como Edimburgo (Escocia) o Quebec (Canadá), citados en la mesa sobre financiación autonómica. Como es sabido, tanto en Escocia o Quebec se han tomado como modelo de la celebración de referéndum independentistas. Su presencia fue lo que primero destapó recelos, tanto en el PP como en un sector de la Generalitat.
Presidencia estudió cuidadosamente la invitación realizada y declinó su asistencia. Tal y como avanzó LA RAZÓN, Puig se sumó a la reivindicación de Aragón que reclamó la participación de sus consejeros en las mesas redondas. Así, se abría más el espectro de autonomías que no son claramente pro soberanistas.
Dado que no se atendió esta petición, Puig optó por no asistir, aunque sí lo hicieron varios consellers que participaron en las mesas redondas. El resto de presidentes tampoco estuvieron presentes.
La polémica no echó para atrás al presidente de Les Corts, Enric Morera, que sí clausuró la jornada, ni al vicepresidente de la Generalitat catalana, Oriol Junqueras.
También hubo representación de expertos de Friburgo, (Suiza) o Flandes (Bélgica), territorios donde también se han significado los nacionalismos. Sin embargo, tal y como advirtió el PP, no se amplió la invitación a más regiones del Mediterráneo, ámbito en el que se centraba la jornada.
El congreso quedó dividido en varias partes. Las infraestructuras en el Euram, los retos empresariales, la investigación, la dimensión social y la financiación territorial en el contexto internacional.
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