Salvador Navarro: «Si el PP no escucha a los empresarios, difícilmente conseguirá sus votos»

El presente año es muy importante para Salvador Navarro. Tendrá que ser revalidado como presidente de la Confederación Empresarial Valenciana (CEV) y es posible que se presente a las elecciones de la patronal autonómica. Por el momento, según él, sigue centrado en transformar la provincial.

- ¿En qué situación presupuestaria se encuentra ahora mismo la CEV? ¿Cuál es el porcentaje de financiación pública y privada?

- En 2008 teníamos unos ingresos de entre once y doce millones de euros. Este año cerraremos el ejercicio con unos 2,2 millones y, previsiblemente se reducirá en 2015. En porcentaje, la cifra de 2014 fue de un 25 por ciento de financiación privada, mientras que en 2008 era menos del dos por ciento. Mi idea es que sea el 60 por ciento, aunque en la Asamblea el peso será de las federaciones y asociaciones. El peso del voto de las empresas privadas puede ser como máximo del 30 por ciento, haya las que haya.

- La Federación Valenciana del Mueble ha tenido que cerrar su sede, ¿por qué se están produciendo estos cierres?

- La apuesta por las empresas privadas es muy importante y las federaciones tienen que hacer algo parecido a la Confederación. Tenemos que ser más proactivos. Si las Federaciones ofrecen servicios, tienen que venderlos. Con esa independencia económica tienes más independencia para trasladar los problemas al Gobierno autonómico, o a los locales. Los empresarios tenemos que reflexionar sobre el poco espíritu asociativo que tenemos. Si de verdad los empresarios quieren tener un modelo asociativo importante, deben hacer una apuesta seria por el mismo.

- ¿Se va a presentar a las elecciones de Cierval?

- Me voy a presentar a las elecciones de la CEV, que son el 30 de abril. De aquí a ese día tengo mucho trabajo para trasladar mi modelo y mi proyecto. Son cuatro años más, y tengo intención de cambiar cosas.

- La pregunta era sobre Cierval.

- Estoy centrado plenamente en la CEV. En Cierval estamos debatiendo el modelo que debe de tener, pero no sobre la presidencia. De aquí al 30 de abril tengo trabajo para dar y vender y la apuesta que quiero hacer es por consolidar estas actuaciones que estamos haciendo. Lo voy a hacer incorporando gente joven, regenerando empresarialmente también los órganos de gobierno. Tener un posicionamiento más activo en la sociedad civil. Tenemos un problema, y es que no estamos en Madrid, y eso no es solamente un problema político, también empresarial y tenemos que trabajarlo, y eso se hace en conjunto. Lo de ir de «llanero solitario», no lo veo.

- ¿A quién se refiere cuando habla de «llaneros solitarios»?

- La sociedad valenciana siempre actúa de «llanero solitario». Tenemos un problema de vertebración que tenemos que trabajar, y eso se hace dándole cariño a Castellón y Alicante.

- ¿El empresariado valenciano está lo suficientemente unido?

- Se han hecho avances, aunque luego hemos dado un paso atrás. Yo quiero que los ministros vengan aquí y se me respete tanto como cuando van a Cataluña y eso lo tenemos que ganar nosotros, diciendo lo que hay que decir, como se lo dijimos a Montoro. Que vean que esta Comunidad no es solo un problema, sino también una de las regiones más importantes de España.

- ¿Les dejó satisfechos la visita del presidente del Gobierno la semana pasada?

- Me quedo con el buen sabor de boca de la visita a una planta valenciana y, tal vez, con el mal sabor de boca de que nos tenemos que hacer valer.

- ¿Realmente cree que la crisis ya ha acabado para las empresas?

- Hay una clara recuperación económica y está claro que hemos tocado fondo. De ahí a que se acabe la crisis... La crisis se acabará cuando tengamos el nivel de empleo anterior a ella, y aún vamos a tardar. La única manera de reducir los indicadores negativos que quedan es reducir cargas impositivas para que se mueva el consumo interno. Otras formas serían un plan de rehabilitación de viviendas, y destapar el fraude fiscal.

- ¿En las empresas se percibe que ya llega el crédito?

- Sí, sí que llega, pero hay que ver a qué empresas se les da el crédito, y a qué precio.

- ¿Cree que la Administración Pública ha recortado ya todo lo que podía o aún se puede hacer más?

- La Administración valenciana es una de las que más ha recortado en empresas públicas. En una Administración siempre queda por hacer, pero la valenciana ha dado pasos importantes. Hay que unir eso con la colaboración público-privada. Esta casa va a defender la iniciativa privada por encima de todo y el modelo de futuro de cualquier gobierno pasa por cooperar con las empresas. Esa sí que es una apuesta de aquí a las elecciones, ese modelo es el que tiene que imperar. La iniciativa pública, como defienden algunos grupos políticos, no tiene mucho sentido porque todo eso al final hay que pagarlo.

- ¿Cómo ve el panorama de cara a las elecciones autonómicas? ¿Le asusta un tripartito?

- No, pero tenemos que saber qué programas lleva cada uno. Hay algunos que se centran más entre lo público y lo privado y hay otros que solo en lo público. Esta casa siempre va a defender la seguridad jurídica para los conciertos que ya están vigentes, y que no haya subidas impositivas.

- ¿Les da la sensación de que la Administración les escucha?

- En periodo electoral sí.

- ¿Y en periodo no electoral?

- Escucha, pero tiene sus tiempos. Yo le dije al Consell que no nos parecía bien la Ley de transparencia valenciana, porque es mucho más exigente que la nacional, y se aprobó igualmente. No sé que beneficios reporta. Si esperan conseguir votos, desde luego del lado empresarial no sé si encontrarán.

Presencia en Madrid

Hace poco más de tres años que llegó a la presidencia de la CEV y lo cierto es que en poco tiempo le ha dado la vuelta a la patronal. Quiere que sus ingresos sean mayoritariamente privados para ganar en independencia. La falta de presencia en Madrid de la sociedad civil valenciana es una de sus principales preocupaciones y sabe que la solución pasa por la unión.