Salud

Un error de la OMS lleva a miles de valencianos a urgencias por la gripe

La organización erró al no incluir la cepa activa, según denuncia el sindicato médico CESM, que prevé un empeoramiento de los casos ante el fin de las vacaciones y la vuelta al cole y el trabajo

Una mujer acude al médico el pasado octubre al comienzo de la campaña de vacunación contra la gripe
Una mujer acude al médico el pasado octubre al comienzo de la campaña de vacunación contra la gripelarazon

La organización erró al no incluir la cepa activa, según denuncia el sindicato médico CESM, que prevé un empeoramiento de los casos ante el fin de las vacaciones y la vuelta al cole y el trabajo

El colapso en los servicios de Urgencias y en las consultas de Atención Primaria a causa de la gripe tienen su origen en una mala planificación de la sanidad y en un «fallo» de la Organización Mundial de la Salud. Según el secretario general del Sindicato Médico de la Comunitat Valenciana (CESM-CV), Andrés Cánovas, la OMS erró con la vacuna y no incluyó la cepa que está haciendo estragos entre la población valenciana (425 casos por cada 100.000 habitantes). Se trata de una cifra «que ha causado dificultades en la asistencia sanitaria debido a la disminución de recursos y de personal que se viene arrastrando desde hace años».

Cánovas confirmó ayer la situación vivida en los últimos días con pacientes de Urgencias esperando en pasillos del Hospital Peset, el General de Valencia y el Arnau de Vilanova, que han tenido que habilitar una sala libre y la han reutilizado para albergar a pacientes «y no tener que dejarlos en los pasillos».

Esta situación «son resultado de la disminución en un 0,6 por ciento del PIB sanitario con lo que se ha reducido el número de recursos y de personal; una mala planificación del funcionamiento de la asistencia sanitaria y a causa de que la OMS no ha incluido la cepa que este año está activa. Todo ello repercute en una peor calidad asistencial con citas en Atención Primaria para hasta ocho días más tarde y esperas en Urgencias de entre cuatro y seis horas».

Es más, Cánovas vaticina que la epidemia de gripe empeorará en los próximas días a causa del fin de las vacaciones. «La gente ha vuelto a trabajar, los niños al colegio, los estudiantes a la universidad... los contagios van a aumentar».

«Faltan médicos», sentencia. En concreto, unos mil en la Comunitat Valenciana. Explica que este déficit es difícil de solucionar y más aún cuando la Comunitat no recibe del Estado el dinero suficiente para sostener el sistema. «El reparto sanitario no es justo. Un ciudadano vasco tiene entre 2.300 y 2.400 euros para sanidad mientras que a un valenciano le corresponden 2.000 y ello pese a que la Generalitat Valenciana destina el 46 por ciento de su presupuesto a esta área frente al 23 por ciento del País Vasco».

Cánovas admite el «esfuerzo de los gestores» de la sanidad valenciana «pese a que no han programado los estragos de la gripe, que eran imprevisibles debido al fallo de la OMS».

En cuanto a la responsabilidad ciudadana y el abuso de los servicios de Urgencia, declara que «cuando uno está enfermo, quiere que le vea un médico», aunque reconoce que entre el 25 y el 30 por ciento de los casos vistos en Urgencias la pasadas navidades no eran urgentes. «Pero esto no se va a evitar nunca. Ni en España, ni en Francia ni en Alemania».

Por su parte, la Conselleria de Sanidad da una visión distinta y aseguró ayer que la actividad de urgencias por la incidencia de la gripe en la Comunitat Valenciana «está en la media habitual» en estas fechas de invierno, y por lo tanto «es elevada y con alta presión asistencial, debido al incremento de infecciones respiratorias por el frío».

La Conselleria de Sanidad realizó esta valoración después de que la tasa de gripe en la Comunitat Valenciana en la primera semana de 2018 se haya reducido un 28 por ciento con respecto a la última del año pasado, al pasar de una incidencia de 200,1 a 143,8 casos por cada 100.000 habitantes.