Ballarín y cinco alcaldes, los escollos entre PP y C’s

La próxima semana será clave para cerrar la investidura y, de momento, los de Rivera no dan su brazo a torcer.

Tras su reunión con Cifuentes, Ignacio Aguado aseguró que el «caso Ballarín», a pesar del auto de desimputación, «no huele muy bien». Evitó, sin embargo, concretar qué posición adoptará su grupo finalmente si Ballarín recoge su acta de diputado, aunque está previsto que hoy dé algún detalle más al respecto en la presentación de su decálogo de medidas contra la corrupción. El dirigente de Ciudadanos sí fue un poco más allá al pedir a la candidata popular que mueva ficha: «Me preocupa. Espero que Cristina tome medidas y que sea consciente de la responsabilidad que tiene en la Comunidad y con la lista que lleva».

En la valoración que hizo de las reuniones de ayer, Cifuentes dejó claro que, de momento, no tomará ninguna medida sobre su número siete. La ex delegada del Gobierno pidió que no se reclamen responsabilidades en base a «presunciones» y, menos, a una responsable público que «no está imputada». A juicio de Cifuentes, las medidas que reclama Aguado respecto a Ballarín suponen «ir mucho más allá de la autoexigencia que se ha impuesto el PP». También advirtió que si se piden responsabilidades en base a meros indicios, se entraría en una situación negativa de «sospecha permanente todos contra todos».

El escenario cambiaría radicalmente si finalmente Ballarín vuelve a estar imputado. Lo quiso dejar también muy claro ayer la dirigente del PP al recordar el compromiso ético que firmaron todos los integrantes de su lista electoral, que determina que si uno de ellos resulta imputado por asuntos relacionados con la corrupción «se le pedirá su renuncia». Sea Ballarín «o cualquier otro», puntualizó. Al margen de este asunto, Aguado y Cifuentes coincidieron en señalar que el clima de este primer encuentro, en el que no se abordaron «cuestiones de fondo», fue «agradable».

No es, sin embargo, el nombre de Ballarín el único que separa a Aguado y a Cifuentes de cara a la investidura de ésta. La próxima semana ambos están obligados a abordar una de las exigencias que Ciudadanos ha defendido como «línea roja» en las últimas semanas: que los diputados de la Asamblea de Vallecas tengan dedicación exclusiva. Y aquí todas las miradas apuntan a los cinco miembros del PP que el próximo día 13 se conviertan presumiblemente en regidores de otros tantos municipios. Aguado, en la entrevista que ayerpublicaba LA RAZÓN, fijaba posiciones: «Los alcaldes que son diputados tendrán que decidir si quieren ser alcaldes de sus municipios o representantes de todos los madrileños. A nosotros nos parece una falta de respeto que si los madrileños te eligen para que estés en la Asamblea de Madrid, estés a dos cosaso a tres».

Si finalmente Aguado mantiene su «línea roja» hasta el final, Cifuentes tendrá que tomar una decisión. Entre los diputados electos del PP, nueve encabezaron una lista municipal. Sin embargo, y a tenor de los resultados de las elecciones del 24-M, sólo cinco de ellos tienen serias opciones de optar a la reelección como primeros ediles. La número cuatro de la lista es Paloma Adrados –persona de la máxima confianza de Cifuentes– logró la mayoría absoluta en las urnas al hacerse con 14 de los 25 municipios en liza, por lo que sería una de las que tendría que optar entre una u otra responsabilidad. Algo similar le ocurre a David Pérez en Alcorcón. Fue en el puesto número nueve a la Asamblea y en su municipio alcanzaría el bastón de mando con la abstención de Ciudadanos. Sólo impediría su investidura que la formación naranja pactara votar al mismo candidato que el bloque de izquierdas, integrado por socialistas, Ganar Alcorcón e Izquierda Unida, lo que parece, a todas luces, un escenario improbable. El alcalde de Torrejón de Ardoz, Pedro Rollán, también revalidó su mayoría absoluta –con 14 de 27 ediles– y está en la misma situación que Antonio González Terol, cabeza de lista del PP en Boadilla, que arrasó en las municipales con casi el 55% de los votos. González Terol también concurrió a la Asamblea regional como número 46. El otro alcaldable que tiene en su mano recoger el acta de diputado regional es Ignacio García de Vinuesa, candidato en Alcobendas. Sin mayoría absoluta, su investidura parece sencilla al haber sido la del PP la lista más votada con 18 puntos de ventaja sobre la del PSM y al depender únicamente del apoyo de C’s.

Los candidatos populares en Getafe, Móstoles, Leganés y San Sebastián de los Reyes también están entre los 48 diputados electos de esta formación. Su situación es menos comprometida, ya que aunque tienen difícil la investidura, ésta no es imposible. Sin embargo, Aguado debe determinar si la incompatibilidad que él reclama también afecta a la imposibilidad de ocupar un escaño en Vallecas y ser concejal de la oposición en un municipio. Hoy, Cifuentes se reunirá con Gabilondo. La intención de los socialistas es dar la iniciativa al PP. Fuentes del PSM dejan claro que sólo si Cifuentes no logra el respaldo necesario, ellos iniciarían las conversaciones para formar un Gobierno con el aval de Podemos y Ciudadanos. Gabilondo y Aguado también se reunirán hoy.