Ayuntamiento de Madrid

Carmena cierra a los vehículos privados la Gran Vía durante la Navidad

Sólo el transporte público y determinados vehículos autorizados podrán circular. La alcaldesa no ha consensuado las restricciones, que comienzan el día 2 y que quiere mantener en el futuro, con el Consorcio de Transportes.

Fotografía de la calle Gran Vía, tomada ayer con la iluminación navideña.
Fotografía de la calle Gran Vía, tomada ayer con la iluminación navideña.larazon

Sólo el transporte público y determinados vehículos autorizados podrán circular. La alcaldesa no ha consensuado las restricciones, que comienzan el día 2 y que quiere mantener en el futuro, con el Consorcio de Transportes.

Treinta días sin poder cruzar el centro de Madrid en coche. La alcaldesa de la capital, Manuela Carmena, restringirá el tráfico desde el próximo viernes durante toda la campaña navideña en lo que ha calificado de «prueba piloto» del futuro cierre del distrito a los vehículos privados. Y lo ha hecho sin advertir a nadie. Ni al Consorcio de Transportes que tendrá que organizar los imprescindibles refuerzos del transporte público, ni a los grupos de la oposición en el consistorio madrileño, aunque hubo un pleno extraordinario sobre Medio Ambiente y Movilidad esta misma semana. Y, por supuesto, con apenas una semana para que los madrileños se hagan a la idea de que, desde el viernes, acudir al centro en su propio automóvil será misión imposible.

De hecho, los cortes de tráfico comenzarán en el fin de semana más importante del año en cuanto a turismo de compras en el inicio de la campaña de Navidad. En el Puente de la Constitución y la Inmaculada, que este año es más largo que nunca, en el que todos los años se baten los récords de ventas en el comercio y son los días en los que más visitantes recibe la capital, no se podrá acceder por la calle Atocha y Mayor, y se reduce a un carril por sentido y la velocidad en la Gran Vía a 30 kilómetros por hora, además de cerrar las vías de libre circulación en las Áreas de Prioridad Residencial del distrito.

Las restricciones de tráfico afectarán a toda la campaña navideña en tres tramos. El primero comenzará del próximo viernes 2 de diciembre hasta el lunes 11. El fin de semana del 16 al 18 de diciembre tampoco se podrá circular libremente por el distrito. Y el grueso del tiempo en el que se mantendrán cortadas las principales arterias del centro de la capital comenzará el 23 de diciembre y durará hasta el 8 de enero.

En concreto, la Gran Vía quedará reservada casi en exclusiva a los peatones, con un carril por sentido en el centro de la calzada en el tramo comprendido entre la calle Alcalá y la calle San Bernardo. A partir de esta intersección y hasta la Plaza de España, habrá dos carriles en sentido Plaza de España. Por estos carriles podrán circular tan sólo los autobuses de la Empresa Municipal de Transportes y los vehículos autorizados. La Policía Municipal podrá modificar las balizas que limitarán los carriles del tráfico peatonal para facilitar la circulación de vehículos de emergencia y evacuación. Además, la velocidad en la Gran Vía se limitará a 30 kilómetros por hora durante la restricción.

Junto al cierre de esta arteria y, según detalló el Ayuntamiento «ante la imposibilidad de implantar un carril reservado bus-taxi-motos de modo provisional» y, sobre todo, «ante la falta de capacidad de los carriles disponibles en la Gran Vía para asumir la demanda de tráfico de vehículos durante estas fechas», se limita el tráfico en todo el perímetro interior del Centro a los vehículos a motor, salvo excepciones. Según el informe BIG DATA, en 2015, la Gran Vía madrileña fue la segunda calle más transitada de España sólo por detrás del Paseo de Gracia de Barcelona y, precisamente durante el mes de diciembre, fue cuando se registró la mayor intensidad de tráfico tanto peatonal como de vehículos a motor en esta calle madrileña.

Así, el Ayuntamiento de Madrid cerrará también al tráfico en todo el interior del Centro en la calle Atocha, desde la Glorieta de Carlos V hasta la Plaza de las Provincias, y la calle Mayor, desde Bailén hasta la Puerta del Sol. Asimismo, habrá restricciones o cortes puntuales en función de la congestión del tráfico en la calle Segovia, entre la Ronda de Segovia y Puerta Cerrada. También queda prohibida la circulación en las calles de libre tránsito en los límites de la Área de Prioridad Residencial de Embajadores, de modo que se podrá recorrer el eje Ronda de Atocha y Ronda de Valencia, desde Carlos V y hasta Embajadores, Ronda de Toledo hasta Puerta de Toledo, y la Gran Vía de San Francisco hasta la calle Bailén y la plaza de España, pero no se podrá entrar por ninguna de las vías permitidas al interior del perímetro de la APR, ni siquiera para entrar en los parkings públicos.

Será la Policía Municipal la encargada de establecer los controles de tráfico para acceder al centro mediante distintos puntos de control y filtros previos a las zonas restringidas que podrán ser ampliados, modificados o reducidos en función de las necesidades de regulación que puedan apreciarse cada día. En un principio, estos controles estarán situados en la Plaza de España, en la Plaza de Cibeles, en la Plaza de la Independencia, en la Plaza de Cánovas del Castillo, en la Glorieta del Emperador Carlos V, en la Glorieta de Puerta de Toledo, en la Plaza de San Francisco el Grande, en la calle Mayor y en la calle Bailén.

Residentes y servicios

Con todo, el Ayuntamiento de Madrid ha establecido una docena de excepciones para vehículos que sí podrán entrar en la zona limitada. Se permitirá el paso a los residentes y a quienes sean titulares de las plazas de aparcamiento en las calles de acceso restringido. También podrán pasar los taxis, las motos y ciclomotores, las bicicletas y ciclos, así como a los autobuses de la concesión municipal de transporte turístico Madrid City Tour. Las unidades móviles de producción y retransmisión audiovisual, los vehículos con el distintivo «cero emisiones» establecido por la DGT, los que accedan a hoteles y porten maletas o bultos pesados y los destinados al transporte de detenidos, podrán circular libremente. Esta excepción también se aplicará a las grúas para el remolque de vehículos, a los de transporte funerario y a aquellos que a criterio de los Agentes de la Autoridad actuante deban acceder por razones de interés general o necesidad urgente inaplazable.

En cuanto a la carga y descarga, ésta sólo se podrá realizar entre las 23:00 y las 11:00 horas. Igualmente, para quienes quieran acceder a los aparcamientos de rotación podrán hacerlo por las calles o rutas no incluidas en las de restricción de accesos. Sin embargo, debido a que en muchos casos es imposible entrar a estos parking puesto que todas las calles que llevan a los mismos están dentro del perímetro cerrado al tráfico, los servicios de Policía Municipal y los Agentes de Movilidad podrán establecer rutas o recorridos concretos en cada caso singular de ser necesario, sin perjuicio de la normativa general de accesos a las Áreas de Prioridad Residencial, es decir, sin que reciban multas quienes entren al aparcamiento público de rotación. Y las motos no podrán aparcar en ningún punto de la Gran Vía, la Red de San Luis y la plaza de Callao, aunque se habilitarán espacios alternativos de parking.