Ahora Madrid

Carmena quiere dar usos «extra» al Club

Su concejala de Cultura ha pedido un informe de la ratio de actividad del Club en función del horario y los días de la semana para introducir programas complementarios. En 2016 seguirá habiendo cuotas

El nuevo equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid quiere abrir el Club de Campo a más madrileños
El nuevo equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid quiere abrir el Club de Campo a más madrileñoslarazon

Después de la toma de posesión de Manuela Carmena y sus concejales, el gerente del Club de Campo Villa de Madrid, Alfonso Segovia, tuvo que lidiar con las dudas de los abonados, preocupados porque la transformación que pretende Ahora Madrid acabe con uno de los clubs deportivos más prestigiosos de España. Con el mensaje constante de que todos los madrileños pueden acceder a las instalaciones, simplemente pagando la entrada que cuesta 7 euros entre semana, Segovia tuvo que esperar varias semanas de incertidumbre hasta que se resolviera, al menos, la situación del Consejo de Administración, que fue renovado a finales de julio.

Con la nueva concejal de Cultura, Celia Mayer al frente del Consejo del Club de Campo, el primer comunicado, una vez la alcaldesa Manuela Carmena desacartó que fuera a cumplir la propuesta que llevaba en su programa electoral de convertirlo en una granja-escuela, tranqulizó, aunque sólo en parte a los abonados. Mayer pidió un informe sobre la situación económica, social y deportiva del Club de Campo para «evaluar y tomar decisiones a medio plazo»; unas decisiones que pretendían que fueran consensuadas con todas las partes interesadas –en la sociedad mixta Club de Campo Villa de Madrid el Ayuntamiento tiene el 51% de la representación mientras que el resto corresponde a Patrimonio del Estado y a la Real Sociedad Hípica Española–. El objetivo: «Racionalizar y diversificar el uso de sus instalaciones, en tanto públicas, en consonancia con los criterios de la nueva corporación municipal».

Según explicó Mayer estos «criterios» se basan en el «buen aprovechamiento de los recursos públicos» por lo que estaban valorando la posibilidad de «introducir programas complementarios que llenen de actividad los momentos en los que el club no está ocupado y que diversifiquen sus actividades de fomento del deporte». La concejala de Cultura aclaró que, según la información que han recabado hasta el momento, algunas actividades deportivas del Villa de Madrid están saturadas mientras que otras tienen poco uso. Igualmente, dependiendo el día de la semana los usos de las instalaciones varían de mucha ocupación a apenas usuarios.

Para analizar los ratios de ocupación, entre otras cuestiones, hace unos días Mayer se reunió con el gerente del club para pedirle informes sobre el uso que se da a las instalaciones deportivas, con la idea de que los colegios públicos puedan acudir en los momentos de menor afluencia. «Quieren alternativas para dar utilidad social al club y uno de sus objetivos es dar un mayor uso a las instalaciones deportivas entre semana», señaló Segovia.

En la reunión, la concejala de Cultura y varios miembros de su equipo también pidieron al gerente que fuese redactando los presupuestos de 2016 para cumplir con los plazos habituales mediante los cuales entre octubre y noviembre son aprobados por el Consejo de Administración. Sin embargo, también le solicitaron que no se ciñera a un único modelo sino que «dibujara varios escenarios» sin concretar aún a qué alternativas se refería. De hecho, Segovia aseguró que todavía no ha recopilado toda la información sobre la actividad del Club que le solicitaron. Mayer sí le especificó que el próximo año se mantendrán las cuotas y entrarán nuevos abonados.

Actualmente, el club cuenta con 30.000 abonados de los cuales unos 3.000 entraron en los últimos tres años. Cada uno de ellos paga una cuota anual de 700 euros que contribuyen al sostenimiento del club. El resto del presupuesto se nutre con las tarifas de los cursos de las escuelas deportivas, que están abiertas a todos los madrileños, además de por patrocinios, eventos –en el club se celebran algunas de las competiciones hípicas más importantes de España y del mundo, puesto que está en el circuito internacional– y las entradas individuales para la piscina o para utilizar las instalaciones deportivas, como las pistas de tenis. Con 250 trabajadores el coste del Villa de Madrid es de 25 millones de euros que son cubiertos exclusivamente por los ingresos propios del club. «No le cuesta un euro al Ayuntamiento», aseguró Segovia. De hecho, en el último ejercicio se obtuvo un beneficio de tres millones de euros que será reinvertido en las instalaciones.

Reivindicar la historia deportiva

En el último número de la revista que el Club de Campo Villa de Madrid envía a sus abonados cada trimestre, el editorial reivindica el pasado de las instalaciones, que fueron inauguradas en 1931 como parte de la Historia viva de Madrid y del deporte español. En este sentido, recuerdan que el club es sede de algunos de los acontecimientos deportivos más importantes de España por los que han pasado grandes figuras del deporte y que en él se han desarrollado brillantes deportistas.