Caso Malaya

Condenado el edil de Rivas que siguió conduciendo tras perder el carnet ebrio

La Razón
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Sobre las 00:35 horas del pasado 10 de octubre, José Manuel Castro Fernández, concejal de Izquierda Unida de Rivas y responsable del área ideológica de la Agrupación ripense del PCE, conducía un Peugeot por la calle María Moliner de dicho municipio, a sabiendas de que no podía hacerlo al haber sido condenado en sentencia firme de 14 de agosto de 2012 por un delito contra la seguridad vial al dar positivo en un control de alcoholemia. La condena le retiraba el carnet de conducir y le imponía una multa económica por conducir ebrio.

Por eso, y tal y como dicta una sentencia del juzgado de lo penal número 5 de Alcalá de Henares, el juez condena ahora al concejal como «autor penalmente responsable de un delito contra la seguridad vial en su modalidad de conducción, a una pena de 12 meses de multa a razón de 6 euros diarios». Además, se le imponen las costas del proceso.

Castro se defiende en el juicio asegurando que todo fue un malentendido y que fueron los mismos agentes que le multaron los que le pidieron que moviera el coche, que además se encontraba mal estacionado. Los agentes niegan que esta versión se ajuste a la realidad y, de hecho, el juez reprocha a Castro que en un primer momento, cuando cogió el coche mal aparcado para cambiarlo de sitio, no comunicara a los agentes que no podía hacerlo por no tener carnet.

El pasado 29 de octubre, cuando LA RAZÓN dio a conocer la existencia de esta sanción, el PP de la localidad pidió la dimisión del concejal tras valorar que, si bien «un error humano no desmerece una trayectoria política», no es menos cierto que «una conducta reincidente y el quebrantamiento de una sanción impuesta anteriormente no es ejemplar y los cargos públicos debemos dar ejemplo».

Castro se negó a hacer declaraciones, algo que sí hizo Pedro del Cura, líder de Izquierda Unida en Rivas, para asegurar que «el PP está en su derecho de pedir la dimisión, pero nosotros creemos que es desproporcionada. No hubo daños, no hubo personas afectadas, la Policía estaba delante en el momento en el que José Manuel cogió el coche, y en cualquier caso es un hecho personal que no debe trascender a la vida política. Además, ni siquiera están juzgados los hechos».

El caso de Manu Castro, como se le conoce en los pasillos del Ayuntamiento, fue uno de los primeros en enfrentar a la facción más radical de IU de Rivas, a la que pertenece él mismo y Del Cura, y la más moderada, con el alcalde José Masa y Fausto Fernández a la cabeza. Al publicarse la noticia, y en medio de una ardua polémica por la contabilidad de la EMV del municipio (la Cámara de Cuentas habló de una diferencia de 200 millones de euros), el PCE salió en defensa de Castro y pidió, en un comunicado, la dimisión de Fausto Fernández por su gestión en la empresa municipal.