Desalojados otros tres bares de copas por sobrepasar el aforo

MADRID- El pasado día 17 la discoteca «MOMA», situada en la calle José Abascal, tuvo que ser desalojada porque en su interior se quintuplicaba el aforo legal permitido, 298 personas frente a las 1.510 que se encontraban en ese momento dentro del local. El Ayuntamiento de Madrid propuso la máxima multa posible para esta discoteca, dos años de cierre y una sanción económica de 300.506 euros por entrañar un grave riesgo para la seguridad de las personas. Un caso que no ha servido de ejemplo para algunos locales. Y es que la madrugada del sábado, la Policía Municipal desalojó tres locales de ocio de la capital que duplicaban el aforo permitido. Los establecimientos eran la discoteca Caramelo, en Tetuán, el establecimiento La Casa Vieja en Chamartín y Vendetta que se encuentra en el distrito centro norte, informaron fuentes del área de Seguridad del Ayuntamiento de Madrid en un comunicado. Los agentes se enteraron de estas infracciones gracias al aviso de los vecinos.

«Caramelo», en la Avenida de Brasil número 5, el aforo se superaba con creces, ya que había 629 personas frente a las 284 permitidas. En el caso de «La Casa Vieja», en la calle Joaquín Costa 27, fue la Policía Local quien se encargó de que las 153 personas que se encontraban dentro del establecimiento lo abandonaran ya que el máximo legal era de 60, además también se había superado la hora estipulada de cierre. Por último «Vendetta», en la calle Bailén número 24, el aforo no se llegó a duplicar, había 217 personas a pesar de que su licencia sólo permite la entrada de 123, situación que hacía que los clientes tuviesen problemas para andar por el local con comodidad. Los tres desalojos se realizaron de forma voluntaria y totalmente pacífica a pesar de la cantidad de personas que allí se encontraban.

En el caso de la discoteca «Vendetta», los agentes intentaron hacer un recuento de las personas que había en ese momento en el local en presencia de la encargada, pero no fue posible dado el ya que eran demasiadas y era muy difícil moverse en su interior, por lo que procedieron al desalojo parcial de la discoteca. Posteriormente, comprobaron que el aforo no era la única normaltiva que este local había incumplido, ya que, al pedirle a los responsables la documentación del local descubrieron que carecían del seguro obligatorio y de varios certificados relativos a la seguridad del recinto. Cuando terminaron los desalojos los agentes de la Policía Local levantaron las actas por infracción correspondientes de acuerdo a la normativa aplicable según la Ley de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas regional.

Que los agentes actuaran alertados por los vecinos es excepcional, según las citadas fuentes que precisaron que efectivos municipales realizan inspecciones a diario, para evitar tragedias como la ocurrida en el Madrid Arena, y comprueban el alto grado de cumplimiento de la normativa de los locales de ocio nocturno.