Dos incendios arrasan Campo Real y Villanueva

Dos incendios mantuvieron ayer sin descanso a los Bomberos de la Comunidad de Madrid y en tensión a los vecinos de las localidades de Campo Real y Villanueva de la Cañada. Este último, algo más pequeño que el de Campo Real, se dio por extinguido a última hora de la tarde pero fueron necesarias seis dotaciones de bomberos y dos helicópteros para controlar las llamas. El fuego devoró parcelas de pastos recién segados, alguna zona de retama y pinos aislados y en ningún momento amenazó con ser peligroso para la población de la localidad de Villanueva. Eso sí, varias dotaciones se quedaron toda la noche refrescando la zona y controlando el perímetro para evitar que alguna llama reavivara el incendio.

Algo más grande y complicado fue el que se desató por la tarde en el sureste de la región, en el término municipal de Campo Real. Las llamas afectaron principalmente a la zona conocida como Valdemembrillo, según una portavoz de Emergencias Comunidad de Madrid y también requirió amplia presencia de bomberos, brigadas y agentes forestales, aunque al cierre de esta edición aún no se daba por controlado, según las mismas fuentes. El daño medioambiental se centraba en pinar de nueva repoblación, olivo, cereal y alguna vid, según fuentes regionales. A última hora de la tarde ardía la ladera de un cerro aislado y trabajaban dos helicópetros apurando las últimas horas de sol antes de dejar las tareas de extinción para esta madrugada. Aquí han sido necesarios siete medios aéreos y diez terrestres, según Emergencias-Comunidad de Madrid.

Aunque ningún vecino tuvo que ser desalojado por prevención, la asociación de Animales con un Nuevo Rumbo (Acunr) solicitó ayuda vía redes sociales para rescatar a los perros y gatos que tiene en su albergue, situado a un kilómetro de las llamas: «Los amigos de @acunrorg necesitan ayuda urgente tras el incendio por el que han desalojado el refugio. Necesitan transportines y jaulas trampa». Más tarde pedían voluntarios para la acogida temporal de los animales: «Han conseguido desalojar a los animales pero ahora falta la tarea de reubicarlos en casas de acogida hasta que pase el peligro». Poco después anunciaban que el peligro había pasado aunque desde Emergencias aseguraron que en ningún momento hubo peligro el para núcleo poblacional.

A pesar de lo aparatoso de ambos incendios no está siendo un verano especialmente complicado para los bomberos y agentes forestales madrileños. Dentro de unos días se cumplen tres años del incendio que arrasó el monte en Robledo de Chavela quemando casi 1.200 hectáreas y hace dos veranos los vecinos de Valdemorillo y Chapinería estuvieron en peligro por sendos incendios.