El metro 4.0 tendrá el doble de cámaras para garantizar la seguridad

Los dispositivos inteligentes detectarán caídas en las vías y objetos sospechosos.

Casi 100 años nos separan de aquel 17 de octubre de 1919, cuando Alfonso XIII inauguró el metro madrileño con el trayecto Sol-Cuatro Caminos. Ayer, su bisnieto, Felipe VI, comprobó de primera mano los cambios tecnológicos y de infraestructuras experimentados por el suburbano en estos 99 años realizando el mismo recorrido. Los cambios han sido notables, pero lo serán más aún en los próximos cuatro años, cuando la revolución digital se extienda también a los andenes y los vagones. De la mano de Fernando Morales, Coordinador de Ingeniería Estratégica e Infraestructuras Críticas en Metro de Madrid, repasamos las últimas novedades del proyecto «Estación 4.0»

CÁMARAS «DETECTA-CAÍDAS»

La función de las cámaras de seguridad en la red del suburbano ya no será la misma. Para empezar, aumentará su número: de las 4.800 que actualmente se encuentran en tierra –es decir, andenes, pasillos, etc– se pasará a unas 9.000. Prácticamente el doble. Además, su función será aún más compleja. A través de analíticas avanzadas, estas cámaras inteligentes podrán focalizar su atención en situaciones concretas: caídas de pasajeros en la vía, objetos perdidos o sospechosos o incluso un excesivo volumen de ocupación en los andenes, lo que pondría sobre aviso al personal operativo para tomar medidas al respecto y controlar así la regularidad de los trenes. Hay que tener en cuenta que todo este sistema pasará por la movilidad: los operarios del metro no tendrán que actuar desde un puesto fijo; todas las acciones serán «telecontrolables» a través de «tablets y smartphones».

MEGAFONÍA INTELIGENTE

Los sistemas de megafonía e interfonía pasarán a ser inteligentes. En lo que respecta a los primeros, además de emitir mensajes en varios idiomas, su nivel sonoro se adaptará dependiendo de la reverberación del momento para alcanzar una mayor inteligibilidad –por ejemplo, si hay excesivo ruido en un andén–. En cuanto a los interfonos, podrán detectar la sintonía de los audífonos, de forma que puedan transmitir con total claridad la información demandada por las personas con problemas de oído.

PANELES MULTIPROPÓSITO

El viajero recibirá la información de modo totalmente novedoso. Los paneles digitales de tecnología LED –de bajo consumo y con un ciclo de vida de hasta 20 años– serán «multipropósito», ofreciendo una información «más rica» sobre incidencias, destinos, itinerarios, etc. Las pantallas serán táctiles; sin embargo, está previsto que los usuarios puedan actuar con ellas desde su «smartphone».

LOS TORNOS-SEMÁFORO

Esta fue una de las incorporaciones anunciadas el pasado mes de julio. Los tornos de las taquillas incorporarán también iluminación led. Asimismo, informarán a los viajeros sobre la validez de su tarjeta de transportes a modo de semáforo: el verde mostrará que el acceso es adecuado tras pasar el título de transporte y el rojo indicará que no es válido. Además, estas entradas serán más anchas, con vistas a que puedan acceder las personas con movilidad reducida. Morales señala que se trata de una patente realizada por Metro de Madrid.

ESTACIONES «CON RUEDAS»

Y mientras, ¿qué ocurrirá con los vagones? La idea es que, al igual que hablamos de «estación 4.0», también estemos ante el «tren digital», en el que los paneles digitales, la megafonía inteligente y los circuitos cerrados de televisión se integren también en los vehículos, de forma que se trate de «una estación más con ruedas».

¿PARA CUÁNDO?

Mientras que los nuevos tornos estarán ya disponibles en la estación de Gran Vía cuando acaben las actuales obras de remodelación –el próximo mes de abril–, habrá que esperar todavía un poco más para ver las novedades anteriormente citadas. Como indica Fernando Morales, en ese horizonte de 2019 a 2022 se implantarán en la línea 8 –la que transcurre entre Nuevos Ministerios y la T-4 de Barajas–, elegida por «tener una afluencia importante y ser bastante acotada en cuanto al número total de estaciones». La intención es que, en paralelo a esta línea, se trabaje en al menos otras dos.