El pintor que susurraba a los caballos

El artista francés J.C. Vaultman presenta su primera exposición, con la búsqueda del movimiento como leitmotiv.

Estudió Veterinaria, para posteriormente especializarse y enamorarse de un animal en concreto: los caballos de competición. A ellos les dedica casi todo su tiempo desde hace años, y desde que empezó a preparar su primera colección de cuadros, también su talento.

Jonathan C. Vaultman (Bayona, 1978) presentósu trabajo expuesto en el Estudio Cenital (Santa Hortensia 16, Madrid) durante este fin de semana con la siguiente frase: “Pinto mis cuadros igual que trato a los caballos”. La veintena de piezas de su colección novel MOTION PURSUIT #001 evocan ese movimiento que nace del contacto de sus manos con la musculatura de los pura sangre. Dotados de una genética privilegiada, su estética, velocidad y resistencia inspiraron a Vaultman, quien valiéndose del color en casi todas sus gamas, fue enlazando movimiento con movimiento, como si el lienzo fuese uno de sus adorados caballos.

El artista francés ha repartido sus últimos meses entre sus viajes semanales a las cuadras francesas donde habitan sus “clientes” y las largas noches que en su estudio ha necesitado para completar su primera colección. Demasiado ha tardado alguien que nació en el seno de una familia de artistas iconoclastas, y que quizá por esa rebeldía de desafiar a su propio destino, optó formalmente por la veterinaria. Hasta que las células creativas de su ADN dijeron basta.....