Conciertos

Flores encargó 17.500 entradas a la imprenta: 6.900 más de lo permitido

La Razón
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El 9 de octubre de 2012 pudo haber cambiado el sino de la tragedia en el Madrid Arena. Si Flores no hubiera decidido ese día encargar el último pedido de entradas para la fiesta de Halloween que se celebró 22 días más tarde, el aforo podría no haberse superado y, por consiguiente, las avalanchas quizás no hubiesen existido o habrían tenido un resultado menos escalofriante. El último pedido que redactó Flores por correo electrónico a la imprenta Pedraza se efectuó el pasado 9 de octubre. Con los cuatro pedidos anteriores, que sumaban en total 9.500 entradas, Flores aún se mantenía dentro de la legalidad; sin embargo, decidió realizar un último encargo de 8.000 entradas, a sabiendas de que esta cifra completaba un volumen que superaba con creces el límite permitido en el recinto. Exactamente, 17.500 entradas para un aforo de 10.600 personas. El pasado 21 de febrero, el administrador de la imprenta Pedraza, Ramiro Aguado, entregaba en el Juzgado los pedidos por correo electrónico, salvo uno que eliminó el programa informático, y cinco partes de pedido y planchas. Los correos revelan que el máximo responsable de Diviertt realizó cinco pedidos. El primero, el 25 de septiembre, de 5.000 entradas; el segundo, dos días más tarde, de 3.000; el tercero, el 4 de octubre, de 1.000; el cuarto, el 9 de octubre, de 500, y el quinto, el mismo día, de 8.000. Esta prueba vuelve a demostrar que el organizador de la fiesta mintió cuando dijo que la cantidad de entradas vendidas en la fiesta fue de 9.650.