La falta de lluvias obliga a ampliar la campaña antiincendios

La Comunidad ha ampliado 14 días el contrato al personal de los retenes que vigila los montes.

La falta de precipitaciones no sólo está pasando factura a los niveles de contaminación, el campo de la Comunidad de Madrid está atravesando uno de sus peores años y esto, además de afectar a las especies vegetales y animales de la región, ha obligado al Gobierno regional a extremar la precaución ante el alto riesgo de incendios. Y es que más de la mitad del terreno de la región es terreno forestal: el 54,60 por ciento. Por eso, la Agencia de Seguridad y Emergencias de la Comunidad de Madrid renovó la semana pasada 14 días el contrato al personal laboral que trabaja junto a los bomberos en los retenes contra incendios de la región. «Se les abonó una semana de vacaciones a los trabajadores y se ha aumentado la duración de su contrato», explica Carlos Novillo, director de la Agencia de Seguridad y Emergencias Madrid 112, en conversación con LA RAZÓN.

«El cambio climático provoca que las altas temperaturas se perpetúen en el tiempo, por lo que es necesario adaptar las medidas de protección a esta realidad», continúa Novillo. Así, «viendo que este año iban a tardar en llegar las lluvias a Madrid, decidimos extender la duración del contrato», asegura. El plan de protección civil contra incendios forestales (Infoma) lo componen actualmente nueve helicópteros, 456 vehículos y 4.774 voluntarios de protección civil y agentes forestales además de 1.300 bomberos, 500 brigadistas y 215 efectivos de refuerzo de campaña. En total, dedicados a la extinción directa son 2.000 profesionales que estos días mantienen la vigilancia con mayor atención.

La vigencia de este plan estaba prevista desde el 15 de junio hasta el 30 de septiembre pero este año, ante el alarmante escenario (los embalses de la región siguen perdiendo agua y están al 58 por ciento) se ha tenido que alargar.

Sin embargo, a pesar de lo excepcional de la situación, de la no previsión de lluvias para los próximos días y de las altas temperaturas, desde el Gobierno regional también lanzan un mensaje de tranquilidad. «Si bien es verdad que estamos en una época de baja humedad, el riesgo de incendio potenciales se sitúa en un rango medio», señala Novillo. Y es que hay tres factores que suavizan el riesgo: «La disminución de las temperaturas por la noche, que haya menos vientos y una insolación –tiempo que da el sol– menor que en otras épocas del año», subraya Novillo. Aún así, en los campos de Madrid se produce, de media, un conato de incendio al día, algo que «entra dentro de la normalidad», explica el director de la Agencia de Seguridad. «Además, los conatos que se producen no tienen su origen en causas climáticas, sino en quema de podas y pequeños accidentes de tráfico que generan chispas que derivan en incendios».

El año pasado hubo 274 incendios forestales en la región, el dato más bajo de los últimos tres años. Las próximas semanas serán cruciales para no subir la cifra en este 2017.